Sindicalistas de ANDA denunciaron que el nuevo titular de la entidad despidió a varios directores, lo que a todas luces es muy injusto, o súper injusto, dada la excelencia de los servicios de agua durante los dos previos desgobiernos. Más o menos eso deben de pensar los sindicalistas, sin darse cuenta de que más parecen un grupo afín al efemelenismo para proteger a los incapaces que nombraban por doquier.
Cuando los votantes salvadoreños echaron a los efemelenistas por su ideología violenta, incapacidad y corrupción, éstos se apresuraron a blindar o tratar de blindar a sus cuadros, sabiendo que en el mundo real no podrían trabajar, como ya lo demostraron.
Una de sus pensadas fue precisamente la de formar sindicatos protectores de sinvergüenzas.
La ANDA de los pasados quince años brilló por rendir malos servicios, por cobrar aunque no suministraran agua, y hubo que sacar dinero del presupuesto general para pagar sus compromisos.
La Fiscalía tiene el deber de abrir un proceso para determinar a dónde fueron a parar los fondos que ANDA cobra a los usuarios y que por lógica son recursos para que el servicio sea eficiente, no para desviarlos a Dios sabe qué entidades o grupos.
Recibir agua es un servicio por el cual hay que pagar, pues aunque el agua estuviera disponible en grandes reservorios convenientemente localizados a lo largo y ancho del territorio, siempre hay que bombearla, filtrarla, purificarla y enviar a través de una red de cañerías que no está allí desde la Edad de Piedra, sino que hubo que diseñarla, adquirir las tuberías, transportarlas donde van a colocarse, montar la red y hacer las acometidas para cada usuario.
Pero si los directivos y directores, si el grupo encargado de manejar la institución deja que los ingresos se vayan por otros lados y además no protestan por esas indebidas fugas, se convierten en cómplices del saqueo. Y eso debe aclarar la Fiscalía, pues que la gente pague por un servicio que con interrupciones recibe, pese a que los ingresos son suficientes, no es aceptable para nadie.
¡Señor Fiscal, en sus manos queda este escandaloso caso de evidente desviación ilegítima de lo que la gente paga por un pésimo servicio!
Es mejor crear un ministerio de aguas que garantice el suministro
Como hemos dicho, ANDA debe desaparecer y en su lugar crear un ministerio de aguas que se ocupe de todo lo referente al agua, a reservorios, a los raudales que caen cada invierno pero que se deja ir al mar sin siquiera intentar recoger una parte.
¡Qué dieran los pueblos de Israel, Adén, Arabia Saudita y el norte de África por recibir del cielo, cada año, la décima parte de lo que aquí cae!
Nuestro país está cada día más seco y caluroso, no por el “cambio climático” del que tanto se habla, sino por no administrar, aprovechar y retener las aguas del subsuelo, de los ríos que corren, de nuestras lagunas y lagos, del maravilloso regalo que Dios nos hace año con año.
Los efemelenistas han querido atornillar en sus puestos a sus activistas, a los más de cuarenta mil que han estado en la mamandurria desde la cleptocracia de Funes, el mismo reclamado por el saqueo de 351 millones de dólares del Estado que pudieron haber servido para mejores hospitales, escuelas y suministro de agua.