Los grandes maestros enseñan a sus alumnos a pensar, a discernir

En este Día del Maestro debemos recordar los buenos consejos y las enseñanzas que recibimos para agradecerlo y para pasarlas a otros. El 22 de junio es también la fecha del natalicio de Napoleón Viera Altamirano, que fue un gran maestro de periodismo

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Por El Diario de Hoy

2021-06-21 6:45:45

¿Qué es lo que más agradecemos de nuestros mejores maestros? Lo más importante que recibimos de ellos es que nos enseñaron a pensar. De ellos aprendimos a pensar con lógica, con objetividad, esforzándonos para llegar a lo esencial de problemas, a cuestionar nuestras conclusiones, a admitir errores, a analizar las posturas de otros.
Muchos de nuestros maestros lo fueron parte del tiempo; eran ingenieros, investigadores o ejecutivos que trabajaban en lo suyo pero con la otra vocación, la de enseñar y hacer partícipes a sus alumnos de las experiencias, los desafíos y las realidades del mundo que luego iban a enfrentar. Y eso hicimos nosotros cuando a la vez nos desempeñábamos como catedráticos; mucho trabajo la mayor parte del tiempo y también trabajo al exponer, narrar, analizar y aclarar lo que se iba desarrollando.
Pero el aprender no termina allí, en la escuela o academia formal, pues a lo largo de la vida se pueden recibir cursos o estudiar con alguien. Uno puede ser su propio maestro, la gloria del autodidacto. Y eso se da con frecuencia en los países limitados como el nuestro, pero que gracias a las comunicaciones contemporáneas no restringen posibilidades a quien las busca.
Es seguro que un buen número de quienes leen estas palabras agradece a uno o varios de sus maestros, en cualquier nivel de enseñanza, haberles abierto ventanas al mundo, estimulado su curiosidad, lanzarlos en grandes aventuras del saber. Por eso las páginas educativas de El Diario de Hoy siempre han buscado suministrar contenidos muy vistosos, interesantes, que ayudan a niños y jóvenes a preguntarse sobre lo que está más allá de su vecindario, de su pueblo o de su país. Y al tener esa curiosidad, a querer saber más, para ir convirtiéndose en ciudadanos del mundo.
Hay enseñanzas, adiestramientos, que luego sirven para toda la vida, como el uso de una computadora, hacer gnocchis tutelados por una veneciana, las maravillas de la poesía de Rilke expuestas por Gudrun Kihm, adiestrarse en artes marciales. Cada nueva cosa que aprendemos nos enriquece, amplía nuestro potencial, eleva la calidad de nuestro existir.
En este Día del Maestro debemos recordar los buenos consejos y las enseñanzas que recibimos para agradecerlo y para pasarlas a otros.

Un maestro del periodismo, el debate y el amor a la Patria

El 22 de junio es también la fecha del natalicio de Napoleón Viera Altamirano, fundador de El Diario de Hoy, que fue un gran maestro de periodismo y quien inició el debate racional de los asuntos públicos, que antes de él raras veces superaban los personalismos y las diatribas.
Desde su llegada a El Salvador, después de una larga estadía en Estados Unidos, don Napoleón se involucró en el análisis de coyunturas y problemas económicos, entre ellos los provocados por la crisis de los años Treinta y la Gran Depresión. Luego vino el establecimiento de la dictadura martinista, que chocó con la tradición de independencia y valor cívico que guía desde entonces a esta casa editorial.
El Diario de Hoy sufrió censuras previas, suspensiones, un cambio de nombre temporal forzado, la persecución de redactores y columnistas, el destierro del director. Fue gracias a exponer, denunciar, analizar, acuerpar o combatir, que se protegió a la República de graves males, enseñando a muchos a pensar y a ser hombres libres.
Como señaló Goethe, sólo merecen la libertad y la vida quienes la conquistan cada día. Y cada día las personas de bien, los que reflexionan y se ciñen a la regla moral y a los dictados de su conciencia, enfrentan esos desafíos y muchas tentaciones a las que se tienen que sobreponer.
Y ese fue el mérito grande de don Napoleón.