¿Es que el mundo está sufriendo una agresión en la que no se usan bombas sino bacterias?

Nadie sabe si la actual pandemia es consecuencia de una sucesión de errores y torpezas, de un virus desarrollado en laboratorios de quién sabe dónde y vendido a China, de una guerra bacteriológica contra el mundo...

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Parroquia de Panchimalco. Foto EDH/ Yessica Homapanera

Por El Diario de Hoy

2020-04-07 7:01:16

El régimen del dictador turco Erdogan —aparentemente el único “amigo” que le queda al narcodictador Maduro en el sentido que podría darle refugio (si es que el avión venezolano logra evadir las barreras electrónicas que con seguridad van a desplegar los estadounidenses a su paso)— se apropió de un cargamento de equipos médicos destinados a España, aunque ha rectificado diciendo que fue un “error” de funcionarios menores.

Nadie sabe si la actual pandemia es consecuencia de una sucesión de errores y torpezas, si como se dice es de un virus desarrollado en laboratorios de quién sabe dónde y vendido a China, o de una guerra bacteriológica contra el mundo…

Erdogan viene perpetrando abusos contra su propio pueblo, sus vecinos y contra los kurdos, a los que trataron de exterminar a principios del Siglo XX en uno de los más repulsivos genocidios de la historia contemporánea.

Los kurdos descienden de los antiguos hititas, la primera oleada de pueblos arios sobre Europa.

En la última mitad del Tercer Milenio antes de Jesucristo iniciaron los movimientos de pueblos arios sobre Europa: los hititas fueron los primeros, los jonios siguieron y a los jonios, los dorios, estos últimos los que se asentaron en Ática, fundaron Atenas, derrotaron a los persas y se convirtieron en los padres de los poemas épicos con Homero, de la filosofía, del pensamiento crítico, de la democracia, de la más hermosa arquitectura producida por el hombre, de la escultura y pintura, del drama y la comedia, de la lírica y, con ello, de la Civilización Occidental, ahora bajo amenaza por los despotismos mundiales, por Xi Jinping, Putin, Maduro, Assad, el monstruo de Siria…

Los persas soñaron con conquistar Grecia y Grecia terminó venciéndolos. El primer choque entre griegos y persas fue el de las Termópilas, donde Leónidas y sus trescientos guerreros espartanos detuvieron pero no vencieron el avance persa en el 480 a. C.

La batalla decisiva de ese tiempo se libró ese mismo año en la ensenada de Salamina, donde los persas con sus pesadas naves cerraron el escape a la flota griega, cuyas naves más ligeras y rápidas aniquilaron al invasor.

Salamina cambió el curso de la historia; siglos más tarde la flota cristiana derrotó a los otomanos en Lepanto en 1571 y posteriormente, en 1683, los austríacos, con el decisivo auxilio del Rey de Polonia, derrotaron el intento turco de apoderarse del Este europeo, de los Balcanes…

Hay muchos actos de crudo egoísmo pero más de caridad y ayuda a otros

Hay muchos actos de reprochables prácticas en apoderarse de ayuda para otros, pero, a la inversa, sobran los ejemplos de entidades regionales e instituciones locales que han dado muestras de solidaridad y altruismo, como el BCIE y Banco Cuscatlán, que se han unido para fabricar mascarillas, como lo harán empresas nuestras si se les da la tecnología y se les ayuda a encontrar los materiales necesarios. Grupos empresariales como Siman, Agrisal, Roble y Fusal y otros han dado importante ayuda a los centros de cuarentena y demás afectados.

Hay casos conmovedores en el mundo. Un sacerdote italiano pidió que su respirador se lo pasaran a un hombre joven en la cama contigua; una señora de noventa años tuvo igual gesto, diciendo que su vida había sido maravillosa; un joven también italiano alimenta al perro de su vecino en el piso superior con una canasta sujeta a un palo. Son incontables los que llevan comida a personas mayores que no pueden cocinar, que en el supermercado dejan bolsas con alimentos para los que no tienen posibilidad de comprar…