¡Viva Septiembre!

Es tiempo de elevar nuestra percepción y profundizar lo que significa el 15 de Septiembre. Aún con todos nuestros desafíos y problemas, siempre es bueno recordar el sentido último de nuestra emancipación de España.

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Por Eleonora Escalante

2019-09-13 9:15:45

¡Caramba, cómo pasa el tiempo! Otra vez estamos en las fiestas patrias de nuestro país. Es un mes que debe ser celebrado con fervor en todos los rincones de El Salvador. ¿Por qué? Simplemente porque marca una hito diferenciador de libertad. Cuando El Salvador era colonia de España, estaba gobernado por un poder extranjero; se regía por un sistema que respondía a los intereses particulares de la Casa Real de España.

Ser independiente significa que no tienes ningún lazo u obligación con otra entidad o persona y puedes decidir qué hacer, cuándo hacerlo, cómo hacerlo, dónde y hasta por qué defines el rumbo de tu propia vida, tus decisiones y tus motivos para trabajar y realizarte en una sociedad. Ser independiente es una bendición y una responsabilidad.
Septiembre es una oportunidad para celebrar. El Salvador está facultado a ser una democracia libre que elige a sus líderes que mejor nos gobiernan. En nuestra primera Constitución de 1824, su primer artículo proclama: “El Estado Salvadoreño es y será siempre libre e independiente de España y de México y de cualquier otra potencia o gobierno extranjero, y no será jamás el patrimonio de ninguna familia ni persona”.

Tenemos un Estado de Derecho que, aunque ha sido incipiente, existe y puede ser mejorado. La bendición del voto es nuestra más poderosa arma. Todos somos libres de ir a elegir al partido que queramos para nuestro progreso y prosperidad. Y si no nos gusta o no está haciendo bien su trabajo, podemos cambiar de opinión y elegir a otro cada 5 años. Esta libertad comenzó hace 198 años.

Si todavía fuéramos una colonia española o de otra potencia, estaríamos obligados a aceptar de manera obligatoria sus prioridades y políticas públicas, económicas, sociales, religiosas y éticas. Asimismo, tendríamos que retribuirles en impuestos o tributos, sin tener voz ni voto para dirigir nuestra nación.

Es tiempo de elevar nuestra percepción y profundizar lo que significa el 15 de Septiembre. Aún con todos nuestros desafíos y problemas, siempre es bueno recordar el sentido último de nuestra emancipación de España.

Los desfiles públicos estudiantiles, las reuniones familiares con comida típica, actos cívicos culturales para todas las edades, diferentes carnavales en todos los distritos municipales de cada departamento de país, las banderillas de El Salvador en nuestros automóviles, nuestra insignia azul y blanca colgando en la puerta de nuestro hogar, nuestro Himno Nacional cantado todo el mes para que no se nos olvide. Por ejemplo, en otros países de América Latina, la independencia se celebra con dignidad y extrema reverencia. En cada comunidad, colonia o barrio, ricos y pobres se organizan para participar en encuentros gastronómicos, peñas culturales, remembranzas de lectura histórica relevante, exposiciones de pintura, cantos y danzas alusivas, conciertos de música con relación a la libertad patriota, certámenes de poesía y ensayo literario y muchas cosas más. En resumen es una fiesta nacional.

Considero que vale la pena recuperar el fervor por lo nuestro. No he sido una persona muy devota por “el salvadoreñismo”, pero en la medida que he ido madurando, es muy triste evidenciar que muchas de nuestras tradiciones autóctonas se están perdiendo. La generación de mis padres todavía está a tiempo de enseñarnos. Solo el hecho de no ser colonia gobernada por otra nación es una fiesta de gratitud con alegría. El canto a la libertad es un honor. Por Dios que no se nos olvide. ¡Viva Septiembre!

MBA-MEng CEO-Fundadora de Eleonora Escalante Strategy.

www.eleonoraescalantestrategy.wordpress.com