¡El Primer Grito de la Independencia Centroamericana fue una realidad! No es un invento de la historia ni de literatura de la época como ciertos académicos han afirmado, lo cual es lamentable porque colabora para que el fervor patrio se vea disminuido y a veces hasta burlado.
Existen muchos que pretenden desacreditar tal suceso y hay quienes dicen que José Matías Delgado no estuvo el 5 de Noviembre de 1811 en San Salvador, lo cual es falso. Yo tengo pruebas de que sí y estuvo en lo que hoy se conoce como la parroquia nuestra Señora de la Merced, en el centro de nuestra capital.
El 27 de noviembre de 2018, con el párroco de La Merced, pudimos constatar en un libro parroquial de la época, que tiene más de 200 años de antigüedad con puño y letra del prócer y cura provincial José Matías Delgado que ese histórico 5 de Noviembre estuvo en San Salvador y protagonizó la gloriosa gesta. ¿Por qué académicos historiadores se encargan de transmitir a la población que todo es un mito?
Desde los institutos educativos nacionales se debe promover la gesta del 5 de Noviembre de 1811 como fundamental para la libertad de nuestra República, pues valientes hombres y mujeres decidieron luchar por concedernos la Independencia enfrentando encarcelamientos injustos, vejaciones y hasta la muerte.
De forma gradual, se ha procurado por intereses mal intencionados que las nuevas generaciones olviden lo valioso que fue el 5 de Noviembre de 1811: San Salvador se convirtió así en Cuna de la Independencia de Centroamérica gracias a un grupo de valientes hombres y mujeres que decidieron alzarse contra el Imperio Español.
Sin embargo, en los últimos años esta efeméride se ha convertido en un día normal, sin reconocimientos de Estado, sin emociones cívicas, sin rendición de honores a los Padres Fundadores.
Esta Patria querida que nos ha visto nacer y crecer merece su magno homenaje volviendo a celebrar desde las aulas de clase de todo el sistema educativo que el 5 de Noviembre fue, es y será siempre la conmemoración del Primer Grito de la Independencia.
El amor a nuestros símbolos y valores patrios se han reducido sólo a las desfiles tradicionales del 15 de septiembre ignorando completamente lo valioso de aquel movimiento de noviembre. ¿Acaso queremos un país sin memoria, sin respeto cívico, sin valor patrio?
En años anteriores dicha fecha era asueto nacional.
No nos debe avergonzar nuestra historia, es un crimen esconderla y buscar enterrar todo lo que se hizo para llegar a la histórica firma de la Independencia en aquel 15 de Septiembre de 1821.
La historia está con nosotros y el ser injustos con ella es nocivo para el devenir de la Patria. ¡Viva El Salvador! ¡Que viva Centroamérica! ¡Que viva el 5 de Noviembre de 1811!
Licenciado en Relaciones Internacionales.