Prepotencia, irrespeto, mal mantenimiento

Si examina el e-paper de EDH de hace veinticinco y cincuenta años verá que el tráfico aquí es un caso por estudiar científicamente como un proceso antinatural en sentido contrario al ciclo PDCA, (Plan, Do, Check, Ack) que aplican todos los sistemas de mejora continua, incluyendo los japoneses y podría ser una tesis doctoral en el campo de la fenomenología, entendiéndola como el estudio de la “Espiral Viciosa de Empeoramiento Continuo”, de tráfico desordenado, a caótico y de caótico, en la ruta hacia el “hiperdesorden intencionado”.

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El presidente Nayib Bukele afirmó que la variante Delta podría tener varios días de estar circulando en el país. Foto: EDH / René Quintanilla / Archivo

Por Pedro Roque

2021-07-31 3:14:26

Leí el martes en un editorial de El Diario de Hoy el siguiente párrafo: “Según datos del Viceministerio de Transporte, un saldo aproximado de 1,051 fallecidos y 8,290 lesionados fue el resultado de 15,456 accidentes viales ocurridos en 2020, lo cual no deja de ser escalofriante para nuestra sociedad”... Lo de “aproximado”, supongo porque en muchos accidentes los involucrados se ponen de acuerdo sin llamar a la policía.
Es cierto, los datos son escalofriantes, igual que los desaparecidos, homicidios, violaciones, abusos de poder, la exacerbación política y el endeudamiento galopante.
Pero acostumbrados a más malas que a buenas noticias, para los salvadoreños que no conocen otros países, esos números no asustan. Cuando comenté los datos con un amigo, a quien ya no le extraña casi nada, espontáneamente me dijo: ¡Para el desmadre de tráfico que tenemos, no son muchos!...
Si examina el e-paper de EDH de hace veinticinco y cincuenta años verá que el tráfico aquí es un caso por estudiar científicamente como un proceso antinatural en sentido contrario al ciclo PDCA, (Plan, Do, Check, Ack) que aplican todos los sistemas de mejora continua, incluyendo los japoneses y podría ser una tesis doctoral en el campo de la fenomenología, entendiéndola como el estudio de la “Espiral Viciosa de Empeoramiento Continuo”, de tráfico desordenado, a caótico y de caótico, en la ruta hacia el “hiperdesorden intencionado”.
Y digo intencionado porque sabiendo cómo hay que comportarse, intencionadamente y conociendo los riesgos, continúan arriesgándose porque creen que no sucederá lo inesperado, hasta que sucede. Por ejemplo: el martes en la carretera hacia La Libertad, sobre la que yo manejaba a 70 km/h y además en una pendiente hacia abajo, me sobrepasó un pick up blanco de un modelo reciente en una curva peligrosa, por lo menos a 100 Km/h, para cinco minutos después frenar y doblar a la izquierda atravesando peligrosamente en carril en sentido contrario…
Supongo que si algún científico estudia los accidentes, las conductas y las cifras que aquí parecen normales y en cualquier país donde se respeta la lógica, el sentido común y el reglamento de tránsito, resultan escalofriantes, encontrará por lo menos tres causas raíces: 1. La prepotencia que surge en las personas asociada a las ruedas y se incrementa exponencialmente con el número que tiene el vehículo que manejan, desde una bicicleta con dos, hasta una rastra de cinco ejes con veintidós ruedas y así también, la gravedad de los accidentes.
2. La actitud en contra del sentido común, la lógica y el irrespeto al reglamento de tránsito, que no creo es por deficiencias de conocimiento, sino por el placer del riesgo de pasar por encima de lo establecido. ¿Cambiarán las conductas con las nuevas multas?… En todo caso aliviarán la falta de liquidez en el ministerio de Hacienda. Los impuestos y las multas son una práctica vieja que aplican los gobiernos cuando falta dinero y entre más dinero falta, más y más altas las multas, y más y más altos los impuestos.
3. El mal mantenimiento generalizado en todo el parque vehicular, desde las bicicletas hasta las rastras de cinco ejes. Y tampoco es por falta de recursos y conocimientos, pues se sabe que es mejor el mantenimiento preventivo que el correctivo. Pero sabiéndolo y además que ahorra dinero, tiempo y sufrimientos, no se hace. Una forma de entender la condición precaria del mantenimiento vehicular aquí, lo puede comprobar con la siguiente regla: A cualquier hora que salga, desde cualquier lugar y en cualquier dirección, antes de treinta minutos encontrará un vehículo averiado” obstruyendo el tráfico.
La solución para menos accidentes y sus consecuencias: reducir la prepotencia, respetar las señales y tiempo y recursos para mantenimiento. Y más, estimados lectores, en las próximas vacaciones para que vuelvan sanos y salvos a su casa.

Ingeniero/Pedroroque.net