Policía rural

.

descripción de la imagen
Foto referencia

Por Ricardo Sosa

2019-06-11 7:10:33

La semana anterior se conoció el nombramiento del señor comisionado Mauricio Arriaza Chicas como nuevo director general de Policía Nacional Civil, y generó las primeras noticias sobre disposiciones, acciones administrativas y operativas para la corporación policial en beneficio de la población, manifestando que desarrollará un proceso de ordenamiento y planificación estratégica para fortalecer las acciones de combate y represión a diferentes delitos, de igual forma la presencia de mujeres y hombres policías para el efecto disuasivo y de servicio a los ciudadanos.

Dentro de los anuncios públicos me causó mucha satisfacción y esperanza, el relacionado al fortalecimiento de la denominada “policía rural” iniciando con el despliegue de elementos policiales para proteger la temporada de diferentes cosechas, y una de las estrategias es mejorar y fortalecer grupos conjuntos rurales con el apoyo incondicional de la Fuerza Armada de El Salvador-FAES para lo cual ya se generaron reuniones con el señor ministro de la defensa nacional René Francis Merino Monroy quien reiteró su apoyo estratégico y de manera inmediata.

Esta reactivación y recarga de la policía rural pretende impedir el control, combate y evitar la expansión de estructuras criminales organizadas en las zonas rurales y semi urbanas del interior del país para reprimir y prevenir la delincuencia que afecta a los pobladores, cantones, caseríos, fincas, sector azucarero, agrícola, cafetalero, ganadero, ecoturismo, medio ambiente, restaurantes y pequeños hoteles, transportistas entre otros.

Hace dos semanas estuve en varios sectores de Ataco, Ahuachapán, y es frecuente encontrarse policías y miembros de la FAES completamente sudados, su piel quemada por el sol y las bajas temperaturas de la zona pero con la disposición de servicio a la población, algunos de ellos con uniformes dañados, con munición incompleta, sin lámparas de mano adecuadas, chumpas para temperaturas bajas.

No observé que anduvieran raciones de comida entre algunas de las limitaciones a simple vista, por lo que es oportuno ahora que se anuncia el relanzamiento por parte de la PNC el considerar algunas sugerencias como:
– La capacitación y adiestramiento especializado para zonas rurales y semi urbanas es fundamental para que tengan conocimiento pleno de los sectores donde serán asignados.
– Equipar a los policías y miembros del ejército de manera completa, con tecnología de punta, incluyendo drones, GPS, armas de fuego en excelentes condiciones, munición nueva y con suficiente dotación y reserva, chalecos antibalas ultima generación, lentes para vigilancia nocturna, comunicación celular y satelital, motocicletas todoterreno y otros vehículos con doble propósito, chumpas especiales, apoyo por medio de helicópteros PNC o FAES en casos de apoyo o heridos de nuestros policías y soldados que reciban atención inmediata especializada.

– En sus puestos o cuadras que cuenten con los servicios básicos, además de cocinas, refrigeradoras, zonas de descanso dignas, personal que pueda apoyarles con la preparación de alimentos y se dediquen a descansar.

– Un equipo de inteligencia y contra inteligencia multidisciplinario que provea insumos a los responsables de cada zona
– Buscar acuerdo y armonía con los roles de servicio asignados a miembros de la PNC y FAES para la unidad y trabajo en equipo

Con la presencia de autoridad policial especializada se evitarán además desplazamientos forzados internos, proteger a las familias del campo, y generar un ambiente adecuado para la productividad y el desarrollo de la población, pero también infraestructura ferroviaria, ríos; podría ser el despertar del “gigante dormido” del sector agropecuario. Miembros de la policial rural y del ejército su trabajo en lo rural y el campo no es en vano. Dios les bendiga y les proteja para servir y proteger a la población y para lograr seguridad que permitirá el desarrollo.

 

Experto en seguridad y criminología