Último informe de CIDH sobre El Salvador: las puertas están abiertas

En el capítulo 6 de su informe la Comisión hace referencia al derecho a la libertad de expresión. De manera puntual en el subtítulo denominado “Intimidaciones y descalificaciones a periodistas y medios de comunicación”, se plantea que los medios de El Faro, Revista Factum, El Diario de Hoy y La Prensa Gráfica “habrían sido particularmente hostigados y estigmatizados por el presidente y funcionarios de la Administración Pública a raíz de sus artículos, coberturas e investigaciones periodísticas."

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De izquierda a derecha: William Ulises Soriano Cruz, su hermana, Dalila Marisol Soriano de Rodríguez y su hijo, William Soriano, actual diputado de Nuevas Ideas.

Por Celia Medrano

2021-11-04 6:22:51

En diciembre 2019 la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) realizó una visita “In loco” autorizada por el gobierno de El Salvador con el objetivo de verificar en el terreno la situación de los derechos humanos en el país.  La CIDH es un órgano autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA). Tiene el mandato de promover la observancia y la defensa de los derechos humanos en la región.

De esta visita, la Comisión emitió observaciones preliminares en el mismo diciembre 2019. Manifestó preocupación respecto a información recibida en el ambiente de garantías para el ejercicio de la libertad de expresión, por lo que una de sus recomendaciones al Estado salvadoreño fue la de “Propiciar un entorno de trabajo seguro para los periodistas y el respeto de la independencia de los medios de comunicación, en particular, la independencia editorial, respetando los estándares internacionales en materia de acceso a la información pública”. La Comisión también recomendó en ese momento “evitar la estigmatización y la desacreditación de periodistas y defensoras y defensores de derechos humanos, asegurando que las declaraciones de las autoridades públicas sean respetuosas de su labor”.

Casi dos años después, la CIDH hace público su informe sobre la visita “in loco” realizada. Sus observaciones son muchas y sobre variados temas, todos de suma importancia para el país.

En el capítulo 6 de su informe la Comisión hace referencia al derecho a la libertad de expresión. De manera puntual en el subtítulo denominado “Intimidaciones y descalificaciones a periodistas y medios de comunicación”, se plantea que los medios de El Faro, Revista Factum, El Diario de Hoy y La Prensa Gráfica “habrían sido particularmente hostigados y estigmatizados por el presidente y funcionarios de la Administración Pública a raíz de sus artículos, coberturas e investigaciones periodísticas."

Continúa planteando la CIDH en su informe que, frente a las graves afectaciones a la institucionalidad democrática, la Comisión ha venido documentando, desde su visita in loco, denuncias sobre el creciente ambiente hostil para el ejercicio de la libertad de expresión en El Salvador, lo que afectaría especialmente a las y los periodistas independientes. La CIDH señala que el uso recurrente de mensajes denigrantes por parte de actores gubernamentales contribuiría a crear un ambiente degradante hacia la prensa.

La CIDH observa que los ataques en redes sociales cobran especial virulencia contra mujeres periodistas, quienes enfrentan riesgos específicos basados en su género, que se traducen principalmente en ataques y amenazas en línea con el objetivo de intimidarlas, deslegitimarlas y silenciarlas.

Al difundirse esta semana el informe, algunos actores han empezado a plantear que su contenido es falso y que de ninguna manera la libertad de expresión está en riesgo y que ningún periodista es objeto de agresiones y obstaculización a su labor. Si esto fuera así, entonces no habría ningún inconveniente para atender la solicitud de la comisión para que el gobierno de su anuencia para la realización de una visita de trabajo por parte de la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la CIDH, que permita a esa Oficina monitorear y recabar información de manera directa acerca de la situación del derecho a la libertad de expresión en El Salvador.

La CIDH reitera su compromiso y voluntad para colaborar con el Estado salvadoreño en el cumplimiento de sus obligaciones internacionales en materia de derechos humanos y ofrece su cooperación técnica y permanente. Esta en manos de la administración gubernamental actual retomar este ofrecimiento. Manifestando sus preocupaciones de manera prudente y diplomática, propio de un organismo de esta naturaleza, la CIDH deja abiertas sus puertas. Será un grave error no aceptar esta colaboración, puesto que permitir que siga en escalada una campaña permanente de agresión hacia periodistas puede saltar hacia acciones contra su integridad física e incluso sus vidas. Esto implicará claras responsabilidades para quienes no hayan tomado las medidas que están obligados a tomar para evitarlo.

Periodista especializada en derechos humanos y educación para la paz.