Pues sí, casi sin darnos cuenta llegamos otra vez al mes más esperado durante el año… En lo religioso, celebraremos un año más la Navidad, el acontecimiento más importante del Cristianismo… En lo familiar, es el mes en que vienen hermanos, primos, parientes y amigos de EE.UU. y otros países, y el 24 de diciembre, el esperado intercambio de obsequios…
En lo comercial, todas las empresas fabricantes de productos de consumo familiar, de alimentos, de vestir, calzado, regalos y muchos otros, que esperan equilibrar sus cuentas con la temporada de Navidad…
Para las generadoras de electricidad, subirán sus ingresos extra por el consumo de los millones de luces adicionales que colocamos en las casas…
Para los bancos y las financieras cuyos clientes pagan con tarjetas de crédito, les llegará alrededor del 5% de todas las compras que realicen sus tarjeta habientes , más los intereses en los siguientes meses de los que no puedan pagar a tiempo las deudas contraídas para quedar bien en Navidad.
Supongo y espero, que también será un buen diciembre, para las tiendas en los centros comerciales, las de los pueblos y los mercados… Cuando el consumo se incremente un 40% o más en diciembre, unos más y otros menos, todos ganamos algo….
Para las ciudades como San Vicente que celebran sus “fiestas decembrinas” los vicentinos tienen medio mes de fiestas todos los días, en los que cada día un barrio y las asociaciones le ponen creatividad a sus carrozas con alegorías típicas de diciembre, muestran a las lindas reinas y finalizan la noche con una quema de fuegos artificiales, el olor particular del invento de los chinos y la correspondiente carga de gases contaminantes para el medio ambiente….También, para el medio ambiente, son los cientos de miles de toneladas de basura que termina en los ríos y los rellenos sanitarios….
Para los hospitales también habrá quehacer, ojalá que menos que el año pasado, porque siempre hay padres descuidados que les compran cohetes a sus hijos pequeños y más de alguno se quedará como “recuerdo” del 2019, un buen susto, un par de dedos menos o con las manos marcadas para toda su vida.
Y para los señores que trabajan en la recolección de basura, además de las propinas que les damos por Navidad, les dejamos en las calles cientos de miles de toneladas de basura…
Para las empresas, que termine el 2019 y que en 30 días empiece el 2020, es una nueva esperanza por las ansiadas políticas que incentiven la inversión y se creen puestos de trabajo productivos… ¡Por favor, no más puestos en el gobierno y en otras instituciones!…
¿Y qué podemos hacer los salvadoreños para dinamizar la economía?… Pues lo mismo que hacen los alemanes que priorizan los productos Made in Germany, los mexicanos “Made in México”, los españoles “Made in Spain”… Nosotros aquí, prioricemos en nuestras compras para obsequios en Navidad, productos “Made in El Salvador”…
Muchos productos Made in El Salvador se exportan y cumplen estándares de calidad internacionales, por lo que, también a los parientes y amigos que nos visitan, les recomiendo comprar productos hechos aquí.
Lo dije la semana pasada y lo vuelvo a decir: con cada producto que compramos hechos en otros países, destruimos puestos de trabajo aquí y ayudamos a mantener y crear fuentes de empleo allende de nuestras fronteras.
A cada visita que recibo, lo llevo a los centros comerciales y recomiendo comprar productos de aquí… Es lo mínimo que podemos hacer, como aportaciones para dinamizar la economía.
Pues sí… Otra vez es diciembre y otra vez ocurrirá lo que pasa cada diciembre… Por mi parte cumpliré y celebraré un año más….
¡Disfrutémoslo en familia y lo mejor que podamos!…
p.roque@gccinternacional.com.