Esplendor de la “nada” del ser

La “Nada” es el sonido primordial de la Creación cósmica, en el lejano verbo sánscrito. Según la astrofísica no existe vacío en el Universo (Además de los elementos primordiales: oxígeno, hidrógeno, carbono… lo llena la llamada “anti-materia”).
La “Nada” nos permite escuchar nuestra voz (resonancia) interior ante el silencio de las multitudes –cuando a éstas las calla la Historia o las dictaduras. El silencio del espíritu es esencialmente el que nos permite escuchar la verdad y
las voces del alma (atman), nuestro ser íntimo e infinito. Cuando quedamos solos —apartados del mundo externo—es cuando encontramos nuestro paraíso y celeste universo interior. En ese episodio -de revelación y despertar de la consciencia- comprendemos que no estamos solos en la vida y en la Creación. Que la divina presencia ilumina nuestra alma inmortal. Este es el esplendor de la “Nada” del ser. La resonancia interior que llena plenamente el vasto silencio de la vida.
Después de invierno adviene primavera y más allá de la noche de la Historia alumbra el rubio sol. Luego más allá del silencio, se escucha tu risa y tu verdad. Si cierras los ojos y quedas sin decir palabra, verás que no existe silencio en derredor. Oirás el canto de zorzales; la voz del viento y de los árboles, cuando no la frase de amor de un ángel al oído. <palabrasbalaguer.facebook.com>