Tirso de Molina

En varios momentos le llamaron el “Fraile Mercenario”, restringieron sus escritos e incluso lo trasladaron a otros lugares de Madrid. Pero él siguió escribiendo, como buen ejemplo de alguien a quien le gusta el teatro y la literatura y que los destierros no lo opacarían

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Imagen de carácter ilustrativo y no comercial. https://www.instagram.com/p/CWLx7gQvyPn/

Por Pedro Roque

2021-11-13 8:39:38

Es un conocido fraile y escritor español (1576-1648) que por lo avanzado de sus comedias y dramas en varias momentos le llamaron el “Fraile Mercenario”, restringieron sus escritos e incluso lo trasladaron a otros lugares de Madrid. Pero el siguió escribiendo, como buen ejemplo de alguien a quien le gusta el teatro y la literatura y que los destierros no lo opacarían. Incluso estuvo unos años como profesor de teología en la Universidad de Santo Domingo, donde aprendió muchas historias relacionadas con la Conquista española que luego utilizó en sus obras.

Por ser un personaje conocido, varios lugares llevan su nombre.

Por ejemplo, el “Mercado Tirso de Molina” en la calle Doña Berenguela cerca del Río Manzanares.

¿Y qué tiene de especial? Pues que hasta hace poco era un mercado más o menos olvidado, debido a que los supermercados de famosas cadenas lo habían opacado.

Pero como en todos los lugares hay personas con habilidades especiales, lo han convertido en un nuevo modelo de mercado que ya se está reproduciendo en otros lugares. Se trata de una combinación de “mercado-bar-restaurante” y como está frente a una plaza de unos dos mil metros cuadrados, en la mitad de la plaza hay mesas y sillas para los clientes que llegan a desayunar o a almorzar y en la otra mitad juegos para que los niños se diviertan mientras sus madres compran. Pero lo diferencial y el mejor negocio, es que se ha convertido en el lugar de reuniones por la noche y los fines de semana, pues los negocios de comida que están dentro del mercado, también sirven comida de su especialidad en la terraza. Y también es importante que no hay dos negocios de lo mismo, sino que todos únicos en sus diferentes especialidades. Y como solo hay uno, la opción es ser excelente. Ni que decir de lo impecable del orden y la limpieza calificable con diez, lo mismo que el control de la bioseguridad.

En las noches en el quiosco de la plaza hay conciertos y como la plaza está rodeada de edificios de hasta veinte pisos, hay suficientes clientes todos los negocios y a todos les va bien.
El segundo lugar que conozco a 300 metros del centro de Madrid es la “Plaza Tirso de Molina” con otro tipo de negocios y comida. Aquí son restaurantes con exquisitos menús de entre 20 y 30 euros con especialidades de varios lugares, por ejemplo Galicia con el famoso y exquisito pulpo a la gallega o restaurantes especializados en carnes o paellas, y tiendas de diferentes productos con orientación por los estilos y precios a la clase media que vive en Madrid y los turistas que visitan la “plaza Tirso de Molina”, pues actualmente casi todo el centro de Madrid es peatonal y los buses y taxis circulan con gran cuidado priorizando a las personas.

Y del tercer lugar con el nombre Tirso de Molina, muy cerca de la plaza que les comento, son los “apartamentos Tirso de Molina”. Se trata de un edificio antiguo que como muchos otros, conservando la fachada, fue vaciado por dentro y reconstruido con todo lo moderno necesario para ser alquilado como apartamentos para parejas o familias que los rentan por varios días.

Por el lugar donde se encuentra en verano se puede dormir en los pisos superiores con las ventanas abiertas y respirar el perfume de los árboles y de las panaderías del alrededor que empieza su trabajo de madrugada.

Hay más lugares con el nombre “Tirso de Molina” pero de estos tres tengo recuerdos inolvidables y creo que son buenos modelos de negocios para El Salvador.

Ingeniero/Pedroroque.net