Desgraciadamente El Salvador es conocido por ser uno de los países más violentos y peligrosos, pero afortunadamente, también por defender el derecho a la vida de todos los salvadoreños desde el momento de la concepción hasta la muerte natural. Esto último nos enorgullece a la mayoría de salvadoreños, sin embargo provoca que el marxismo cultural internacional de la muerte apunte sus cañones de guerra hacia nuestras mujeres, familias, niños indefensos por nacer y recién nacidos.
Las industrias del aborto, anticonceptivos, abortivos, drogas usadas para la mal llamada “eutanasia”, hormonas y operaciones – para supuestamente “cambiar el sexo” de personas – cosa imposible puesto que el sexo se define en la concepción -XX o XY y está en cada célula, han difundido sus engaños por el mundo para vender sus productos. Por eso invierten tanto en nuestro país que no se rinde a pesar de las presiones.
El negocio internacional del aborto, algunas embajadas y feministas pro aborto han divulgado una campaña ideológica difamatoria contra El Salvador llamada “Las 17”. Estas “17” mujeres fueron condenadas por homicidio agravado contra sus bebés de término nacidos vivos, estrangulados, acuchillados, apedreados, asfixiados, tirados vivos en fosas sépticas, etc. Ninguno es aborto.
Los aborteros aprovechan estos casos para engañar diciendo que la condena de 30-40 años fue por supuestos “abortos espontáneos”. Falso. No hay ni una mujer presa por aborto porque la pena es de 2 a 6 años, excarcelable y a las que se sí se han provocado un aborto se les da medidas sustitutivas. “Las 17” no tienen nada que ver con abortos de ningún tipo.
Hace unos días salió libre una joven que en 2017 fue condenada porque después de llegar al hospital con hemorragia ocultando su parto, encontraron a su bebé de término en la fosa séptica de su vivienda. Murió por aspirar heces fecales después de 12 a 24 horas de haber nacido. Tenía el cordón umbilical cortado. Ella dijo no haber sabido que estaba embarazada, a pesar de haberse negado a recibir controles prenatales que se le ofrecieron ofrecieron y aceptar que había tenido una relación amorosa con un soldado – ahora dicen que fue violada. Dijo que sintió que le salió algo caliente y se desmayó, pero no se encontró sangre en la fosa ni en la casa. La mamá llevó la placenta al hospital.
Los creadores y promotores de esta campaña ideológica falsa de “las 17” como Amnistía Internacional, UNFPA, entre otros sirve para legalizar en el país este negocio que explota, engaña y daña a las mujeres matando a sus hijos indefensos. La repiten medios conocidos por promover el negocio del aborto como CNN, The New York Times, BBC, y algunos salvadoreños financiados por aborteros.
El Estado tiene una gran deuda con las salvadoreñas con embarazos en dificultades y sus hijos. Ellos necesitan apoyo, no violencia y muerte. ¿Por qué estos organismos que supuestamente defienden los derechos humanos no apoyan al Hogar para madres solteras o el Centro se Ayuda para la Mujer de fundación Sí a la Vida donde se han salvado más de 11mil vidas del aborto? La solución es la vida y el amor.
Para poder ayudar a más mujeres y sus hijos los invitamos a colaborar yendo a ver la premier de la película Inesperado este viernes 30 en La Gran Vía – 6:45pm. Es la historia real de una mujer que llegó a ser directora de uno de los centros abortivos más importantes en EE.UU. y cómo ella va descubriendo la verdad de ese negocio de sangre.