Estas son las mentiras más comunes sobre visas y migración a EE.UU.

He escuchado de mentiras tan ordinarias que hay quienes afirman ser agentes consulares y con eso estafan, pero a usted mi querido lector, definitivamente no lo sorprenderán con un cuento de esos.

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Foto EDH Archivo.

Por Sandra Guevara

2022-02-21 4:52:29

Algunas son bastante comunes, otras quizá hasta burdas, pero hay algunas que parecieran tener sentido; sin embargo, son mentiras. Hoy abordaremos varias de ellas a fin de aclarar el mito.

La visa de turista solo se la dan a personas de dinero. Esto se escucha con frecuencia en la voz popular; sin embargo, no es cierto. La visa de turista será aprobada a cualquiera que cumpla con los requisitos de ley y convenza en la entrevista (con documentos, respuestas, desempeño) al agente consular que de otorgarle una visa no será un inmigrante más. Es decir, que regresará al país después de una corta visita y que durante su estadía en los Estados Unidos no hará nada que no esté permitido bajo su clasificación de visado. Para esto no se necesitan enormes cantidades de dinero, o pertenecer a una clase social determinada. Básicamente se debe probar que los gastos del viaje van por medios propios. Ello bajo la lógica que poseer una visa de turista no es una necesidad de vida, sino un extra, digámoslo así, y que por tanto, no debemos buscarlo a expensas de terceros, sino por nosotros mismos.

Si tenemos deudas no somos elegibles a la visa. Esto también se rumorea mucho: si las deudas o aparecer mal calificado en una agencia de información crediticia harán que automáticamente la visa sea rechazada, y la verdad es que no, aunque puede llegar a tener incidencia. Es decir, tener deudas no es razón de negación de visado, pero estar “ahogado” en deudas sí podría serlo, en el sentido que un agente –al ver la situación financiera complicada del solicitante- presuma que desea la visa de turista para intentar “aliviar” sus finanzas o ir a trabajar a los Estados Unidos. Sin embargo, el crédito bien manejado no es problema.

Es necesario contratar un abogado de inmigración para que un proceso sea exitoso. Esto se dice mucho en casos de petición familiar, visa de trabajo, entre otros. Sin embargo, la respuesta es que no. Una persona bien podría iniciar y llevar a feliz término su proceso migratorio sin necesidad de la intervención de un abogado. El abogado de inmigración está para situaciones más complejas, por ejemplo, casos de apelación, representación en Corte, mociones de reapertura de caso, una valoración profesional sobre un caso, es decir situaciones a nivel de inmigración que no son rutinarias. Obviamente si desea contratarlo para procesos regulares puede hacerlo, pero no es necesario.

Si contrato un abogado de inmigración mi petición familiar avanzará más rápido. Esto tampoco es cierto. Una petición familiar, para el caso, no tardará menos tiempo si contratamos un abogado, porque los tiempos de espera ya están establecidos por Inmigración –no pueden reducirlos los abogados- y obedecen al retraso que tienen en el procesamiento de las aplicaciones, que son miles.

El tiempo otorga residencia permanente. Esta es otra creencia bastante generalizada, por eso escuchamos con frecuencia a personas suponer que su familiar tiene status migratorio, porque lleva años viviendo en EEUU, y no funciona así. El tiempo residiendo en ese país por sí solo no otorga status migratorio. Siempre debe existir un programa al cual aplicar para llegar a la residencia ya sea temporal o permanente.

Mentir u ocultar información. Siempre insisto en este punto porque es de los más utilizados: “no diga tal cosa”, “si pone eso en el formulario se la van a negar”, “mejor diga que: tiene una tienda, que no tiene hijos allá, que nunca ha estado en EEUU, que está acompañada”, en fin, la lista de mentiras es realmente larga, y lo peor de todo: no funcionan, así de simple.

Los “contactos” en la Embajada. Esta es la más rústica de todas, sin embargo, tristemente aún se utiliza y muchas personas son embaucadas bajo este precepto. He escuchado de mentiras tan ordinarias que hay quienes afirman ser agentes consulares y con eso estafan, pero a usted mi querido lector, definitivamente no lo sorprenderán con un cuento de esos.

Directora de COIMSAL Asesoría Migratoria/www.asesoriamigratoriacoimsal.com