Historia de una advocación: Auxilio de los Cristianos

Santa María de Nazaret es desde la antigüedad el personaje femenino más venerado y al que mayor número de celebraciones religiosas se le ofrecen. Su nombre no solamente se menciona en el Nuevo Testamento un total de 19 veces, sino también en otros libros religiosos como el Corán, en donde se le nombra en 34 ocasiones con el nombre Maryam

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El delantero argentino del Barcelona Lionel Messi (L) compite por el balón con el mediocampista francés del Valencia Francis Coquelin durante el partido de la liga española entre el FC Barcelona contra el Valencia CF en el estadio Camp Nou en Barcelona el 2 de febrero de 2019. AFP / Lluis Gene

Por Mario Aguilar Joya

2019-05-24 8:15:31

Sabemos sobre María de Nazaret por su relación filial con Jesús. Su nombre en hebreo es Miryam, mismo nombre que tenía la hermana de Moisés y Aarón. Sin embargo, los nombres de sus padres no aparecen en el Nuevo Testamento, pero sí se encuentran consignados en literatura cristiana extra-bíblica: su madre, de nombre Ana, y su padre, llamado Joaquín. Es así como la tradición cristiana les ha dado identidad a los padres de María de Nazaret.

Santa María de Nazaret es desde la antigüedad el personaje femenino más venerado y al que mayor número de celebraciones religiosas se le ofrecen. Su nombre no solamente se menciona en el Nuevo Testamento un total de 19 veces, sino también en otros libros religiosos como el Corán, en donde se le nombra en 34 ocasiones con el nombre Maryam; es, según muchos teólogos, un libro en donde se le respeta por su castidad y se le admira por su fe. Esta tesis está claramente ejemplarizada en la cita del Corán 21:31: “Y recuerda a María que guardó su castidad, y luego respiramos de ella algo de nuestro espíritu e hicimos de ella y de su hijo un signo de nuestra gracia para toda la humanidad”.

Los mariólogos, teólogos especializados en el estudio de María, son claros en mencionar que para finales del Siglo Primero después de Cristo, las comunidades antiguas de cristianos ya rendían honor a la Virgen María. En el año 345 después de Cristo, Juan Crisóstomo la denomina con el nombre “María Auxilio de los cristianos”. En el año 431 de nuestra era, en el Concilio de Éfeso se le denomina “Madre de la Humanidad” y para el año 532 se le agrega el calificativo “Auxiliadora de los enfermos”.

Además, en la época actual, durante un año cualquiera se estima que al menos 5 millones de peregrinos viajan a sitios marianos, como Lourdes, Francia, y unos 10 millones de personas al santuario de Guadalupe en México, sin contar otros sitios que llevan el nombre de las diferentes advocaciones: Fátima en Portugal, Medjugorje en la antigua Yugoslavia, Emmitsburg Maryland EE.UU. y Checostova en Polonia para mencionar algunos lugares. Se estima que cada día se rezan al menos dos millardos de rosarios en el mundo, para cubrir las peticiones de las diversas advocaciones que tiene la Virgen María.

La Prensa internacional también ha descubierto en la Virgen María un personaje digno de estudio y mención: la revista Time Magazine publicó en la edición del 30 de diciembre de 1991 un artículo sobre la Santa Virgen María y en 1996 la revista Life publica en su portada con el título el Misterio de María, mencionando que “después de 2000 años de la Natividad, la madre de Jesús es más amada, poderosa y controversial que nunca antes”.

Al mismo tiempo en el aspecto familiar el nombre María en español y sus equivalentes en cada idioma vernáculo es utilizado cada vez más frecuentemente por un número mayor de padres de familia para llamar a sus hijas y este nombre sobrepasa el de otras figuras históricas del género femenino.

Cuando se trata de escribir sobre la Virgen María nos encontramos con la dificultad de querer ser muy exhaustivos y cubrir en exceso el tema o muy simplistas y dejar que el lector encuentre la información superficial, ver que ya tenía conocimiento de esto y, por tanto, nada nuevo que aprender. Pero como bien menciona el mariólogo José C.R. García Paredes: “La histografía ha llegado a tal punto de rigor y seriedad científica que resulta deshonesto no tenerla en cuenta a la hora de hablar de María”.

Sin embargo, en este mes que celebramos a la madre no debemos olvidar a “María la Madre de la Humanidad” y que tras el simbolismo, doctrina y dogma bajo la imagen de la Virgen María se encuentra la persona que reconocemos como la Madre de Jesús y que la maternidad trascendente de María nos permite llamarla “Auxiliadora de los Cristianos”.

Doctor en Teología