La campaña que el presidente está haciendo para negar la tragedia que fue la guerra y para calificar los Acuerdos de Paz como una farsa que no tuvo consecuencias económicas y sociales es parte de una campaña más general para inyectar nuevos odios que él cree que van a apartar la vista del pueblo de los fracasos enormes que está teniendo en su administración.
Así, la gráfica adjunta muestra cómo él nos ha llevado a ser el país que ha experimentado la peor caída en las exportaciones durante 2020 en toda Centro América, y a ser el segundo peor en términos de producción. El fracaso es bien grande. En tres de los cinco países de la región las exportaciones subieron, en el cuarto (Guatemala) cayeron, pero sólo 1%, mientras que en El Salvador cayeron eso multiplicado por 14 veces.
Estas caídas extraordinarias se dieron porque el presidente, entre marzo y junio, quiso crear una falsa disyuntiva entre economía y salud, acusando de querer asesinar a sus empleados a las empresas que, cumpliendo con los protocolos de distancia, podían haber seguido operando.
El presidente concentró la furia de sus ataques en las empresas que eran manejadas por personas a las que él tenia una animadversión personal o política. Esas empresas incluían, entre otras, muchas de las exportadoras. Fue en ese período que la producción y las exportaciones del país colapsaron, perdiéndose 61 mil puestos de trabajo.
El presidente mató dos pájaros de un tiro con esta estrategia. Con el cierre de las empresas dejó a la gente sin comida, para luego dárselas en paquetes miserables como un regalo de Nuevas Ideas y de él en lo personal, con fondos del estado, paquetes que los mismos recipientes van a pagar con impuestos para amortizar las deudas que él contrajo para regalarlos.
Mientras tanto, como veremos en las siguientes entregas, también falló en el manejo de la pandemia. Así, por razones que no tienen nada que ver con el beneficio del pueblo, el presidente demostró que no había disyuntiva en sus políticas. Nos llevó al desastre tanto en salud como en lo económico. Esos son los verdaderos fracasos, las verdaderas farsas.
Máster en Economía
Northwestern University