¡Un último paso para una mejor experiencia!

Para brindarte un servicio más ágil y personalizado, necesitamos que completes tu información de facturación.

Actualizar mis datos

Historias que importan, gracias a lectores como tú

El periodismo que hacemos requiere tiempo, esfuerzo y pasión. Cada reportaje es para mantener informado y contar historias que marcan la diferencia

Sucríbete y obtén acceso a contenido exclusivo

  
Suscribirme
EPAPER Especial Derechos Humanos| Ruth López| Donald Trump| Selecta|

La triste carga del ayer

.

Por Carlos Balaguer

Remordimientos, nostalgia, tristeza, desaliento. Todo eso causa los errores del pasado. ¿Qué hacer con tan pesada carga? El mismo hombre nace condenado al error, cuando no al “pecado” cristiano de San Gregorio. Lo peor del caso es que no podemos regresar en el tiempo ni desandar los caminos andados, para remediar lo hecho, que dicho de paso “hecho está”. Es implícito a la naturaleza humana el equivocarse, pero también corregir. Lo sentenció en su época Séneca -el joven: “Errare humanum est, sed perseverare diabolicum”: “Errar es humano, pero perseverar (en el error) es diabólico” -sostuvo. Ya no podemos reescribir el texto del pasado, sino escribir el porvenir con fe, sabiduría y amor. Dejar a un lado del sendero el inútil lastre de las culpas y tropiezos pasados, para reiniciar -animosos y ligeros de equipaje- la marcha al futuro. El escritor Luis Homero nos dice: “Si usted…fue malo, pero se volvió bueno; fue infiel, pero se volvió fiel; fue desleal, pero se volvió leal; fue tirano, pero se volvió justo; fue enemigo, pero se volvió amigo; fue vanidoso, pero se volvió sencillo; fue arrogante, pero se volvió sereno; fue orgulloso, pero se volvió humilde; fue deshonesto, pero se volvió honesto. Entonces, en vez de lamentarse por su pasado, aproveche para vivir bien su tiempo presente”. (Libros Balaguer: Librería UCA y La Ceiba)

KEYWORDS

Filosofía Opinión

Patrocinado por Taboola

Utilizamos cookies para asegurarte la mejor experiencia
Cookies y política de privacidad