Los reiterados actos de actos de corrupción de este gobierno deben ser motivo de preocupación ciudadana. Tenemos a la vista LA CLEPTOCRACIA Y EL CAMINO AL ABSOLUTISMO, cubierto con propaganda, nada sutil, potenciando el desastre en el mediano plazo.
Somos testigos de los allanamientos de la Fiscalía en el Ministerio de Salud y la forma de actuación del mayordomo mayor de la PNC: “Ordene, presidente”. El aviso presentado por la Corte de Cuentas ante la Fiscalía: el gobierno tenía el dinero para pagar salarios y FODES. Han detectado el manejo irregular en $75 millones, así como arrendamientos irregulares de hoteles en cuarentena.
Todo esto requiere explicaciones, no propaganda; apoyo a las investigaciones de las irregularidades de estos funcionarios; no conformarnos con mensajes de una lista de actos de personas corruptas del pasado que son del conocimiento de todos y que están en los tribunales o ya fueron condenadas. Eso ya lo sabemos.
Deseamos las acciones que tomarán con los hechos de corrupción de sus funcionarios, los nombres de los corruptos actuales. LA CORRUPCIÓN NO ES SALUDABLE PARA LA DEMOCRACIA. Queremos investigaciones transparentes y que no se tapen por política como lo están haciendo, mucho menos intimidaciones y amenazas por complacientes mayordomos de la PNC, ni expresiones furibundas y entorpecimientos de autoridad alguna.
La actuación compulsiva de funcionarios gastando y gastando, mintiendo, endeudando, pidiendo más deuda sin ajustar el gasto, más los robos en investigación, nos llevaran a una crisis, aumentando las condiciones de criminalidad, saqueo público y corrupción generalizada.
LA DEMOCRACIA NO SE DEFIENDE RENUNCIANDO A ELLA. Por eso pedimos que no se bloqueen las investigaciones, que sean transparentes y rindan cuentas, que nos digan cómo han gastado el dinero y si lo hicieron para lo que estaba destinado, como en el caso del FODES. La señora multi-usos dice: “Nosotros priorizamos”. No, señora, puede direccionar inversión pública, proyectos, programas, pero no la ley. Lo que queremos saber es ¿DÓNDE ESTÁ EL DINERO? ¿QUIÉNES SON LOS LADRONES? Estas son nuestras condiciones.
Queremos transparencia, rendición de cuentas, eficiencia, un compromiso real de no robar, ni permitir que roben; dejar que las investigaciones hagan lo propio, no maniobren para huir de los controles, ni amenacen, ni usen la violencia contra los que efectúan diligencias; desmantelen los tambores de guerra de su narrativa contra los otros poderes del Estado, voces críticas, comentaristas políticos, medios escritos, radiados, televisivos, ni castiguen vía quitar pautas al que les es incómodo; abandonen la ruta electoral que todos leemos y oímos de su estrategia de levantar cuentos.
El mejor ministro de la historia que se condecora solo y gasta medio millón en imagen después de su orden del 9F; el otro que se llena la cara de lodo para la foto en su candidatura de alcalde de San Salvador; el sofisma de que se quiere destruir el plan control territorial por el interpelado director de la PNC, que el presidente le ordenó no cumplir con su deber y lo blindó con cargo ad honorem, evidente maniobra; no victimicen al ministro Alabí frente a la Fiscalía y dejen la ruta de desprestigio en dirección del futuro y distracción en el día a día. El saqueo del erario a través de pretextos por calamidades es inaceptable, es despreciable, no se puede llenar bolsillos de las figuras del gobierno y personas cercanas mismo, quienes son los únicos gananciosos.
Exigimos integridad, eficiencia, rendición de cuentas, de las cuales a ninguna le hacen mérito. Por favor no nos quieran ver la cara, EL DINERO ALCANZA CUANDO NADIE ROBA, pero ahora este lema brilla por su ausencia. Cumplan con su función, no son eficientes ni eficaces, expongan y sometan al escrutinio publico su gestión, el manejo de recursos que les hemos confiado, sometan la conducta de sus funcionarios al Estado de Derecho y los criterios de sus decisiones a la seguridad jurídica y respeto de la ley; entren al fondo de lo sucio de los negocios que se están investigando, dejen de imprecisiones y vacilaciones, actuaciones basadas en una persona acompañada del poder de las armas, los instrumentos de comunicación y un director de policía al servicio del poder y no de la democracia, todo un retroceso en los avances de los últimos 28 años y un acelerado desmantelamiento de la democracia.
Salvadoreños estamos ante una peligrosa situación. Yo manifesté: EL SILENCIO NO ES MI OPCIÓN. Los invito a no participar en la conspiración del silencio.
General retirado y diputado de ARENA.