Los padres son un pilar fundamental en el desarrollo de cada uno de nosotros a lo largo de nuestras vidas; sin embargo, debemos de empezar a hablar de un tema que siempre se ha considerado tabú en nuestra sociedad: las implicaciones de una verdadera paternidad desempeñada sobre las bases de la responsabilidad, tanto económica como afectiva, que inspire a las nuevas generaciones.
De acuerdo con algunos estudios, en América Latina, 4 de cada 10 hogares sufren de la ausencia del padre, lo que afecta a millones de niños, niñas y adolescentes. Con base en lo anterior, cabe hacernos la pregunta ¿qué representa más la ausencia paterna? Más allá de la separación física, la psicóloga Alejandra Rivera, directora del Centro PE y DE, afirma que estamos ante un padre ausente también cuando este no desarrolla un rol de guía, de mentor, de orientador, de factor de seguridad y estabilidad con el niño y la familia. Es el que, con el rol que desempeña, no crea vínculos seguros y afectivos con el niño.
Muchos padres no imaginan el daño que puede causar en la vida de sus hijos que ellos no estén presentes en los diversos procesos y etapas de su vida. La especialista señala que la primera necesidad de un niño es sentirse amado, pero, además, necesita de apego, de vínculos seguros, de ser atendido y orientado.
Nuestro país no es muy diferente a sus vecinos y, por lo tanto, no es ajeno a ver hogares donde la responsabilidad total recae en la madre o en otros familiares diferentes al progenitor. Según registros de la Procuraduría General de la República (PGR), a diciembre del año 2019, existía un promedio de 35 mil personas con procesos abiertos en concepto de pago de cuota alimentaria; si cuantificamos esos reclamos, la suma asciende a $23.3 millones que hacen llegar a sus hijos los padres demandados.
Por otro lado, el último informe de labores de la PGR, que abarca el período comprendido entre junio de 2019 y mayo de 2020, detalla que la Unidad de Familia es una de las unidades que representa mayor demanda institucional, atendiendo cerca de 45,500 usuarios cada año. Las cuotas de alimentos son la solicitud con mayor demanda de acuerdo a los registros, siendo en un 95 % de los casos mujeres quienes reclaman el establecimiento de cuotas alimenticias para sus hijas e hijos que, ante un abandono, separación o divorcio, son quienes asumen su cuidado; frente a un 5 % de hombres en la misma situación.
En conclusión, es importante que, como hombres, empecemos a abordar estos temas que nos corresponden en lugar de ignorarlos y pretender que el cuidado de los hijos recaiga sobre la madre, lo que encarna un paradigma machista aún arraigado en nuestro entorno cultural. De igual manera, las instituciones educativas y culturales juegan un papel esencial, en aras de promover masculinidades más sanas y con enfoque de responsabilidad afectiva.
Estudiante de Licenciatura en Ciencias Jurídicas
Miembro de Club de Opinión Política Estudiantil.