El Día de la Cruz

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El 3 de mayo, los periodistas fueron limitados al pasillo que conecta el Salón Azul con las oficinas administrativas y de grupos parlamentarios. Foto EDH/ Yessica Hompanera

Por Carlos Alberto Saz

2021-05-03 10:02:01

Ayer, 3 de mayo, celebramos el Día de la Cruz, en honor a la cruz en que fue crucificado Jesús de Nazareth. La celebración consiste en adornar con cadenas de papel celofán de colores, una cruz de palo de jiote, en cuya base se coloca toda clase de fruta, como guineos, sandías, mangos, nances, nísperos, mamones, duraznos, jocotes y otras, principalmente de la época, y luego de adorar la cruz, se pueden llevar los frutos que deseen.

En el patio de cada vivienda se coloca la cruz de jiote con las frutas. Aunque ahora ya se está perdiendo esa tradición. En otros casos la Alcaldía del lugar, en el parque central siembra la cruz con sus respectivas frutas para que la vayan a adorar y luego poderse llevar las frutas que quieran.

Y decían las gentes del pueblo, que si no se ponía la cruz, en los patios de las casas, entonces en la noche llegaba a danzar Satanás, el diablo.

El Diccionario especial de la lengua española define la palabra ‘cruz’, de la Real Academia española, define la palabra ‘cruz’ de la siguiente manera: “1. Sustantivo femenino. Figura formada por dos líneas que se atraviesan o cortan perpendicularmente. 2. En historia se le conoce como patíbulo formado por un madero dispuesto verticalmente y atravesado en su parte superior por otro más corto, en los cuales se clavaban o sujetaban las manos de los condenados a este suplicio (hay muchas más definiciones de ‘cruz’ en este diccionario).

¿Pero cuál fue el origen de esta festividad? Se origina luego de la conquista de los españoles, que trajeron el cristianismo a estas tierras, y les enseñaron a los indígenas, entre otras cosas, a sembrar una cruz de jiote adornada con frutas en los patios de las casas.

Derivados de la palabra ‘cruz’ son estos: cruces, crucifixión, crucificar, crucifijo, crucificado, cruzado (salvadoreñismo que señala a una persona que habla disparates, que no está en su sano juicio), crucero (el que tiene por oficio llevar la cruz por delante de los arzobispos en las procesiones y otras funciones sagradas), crucial, cruciata (planta herbácea de la familia gencianáceas de flores azules y hojas dispuestas en cruz) Cruzada.

También existe el nombre propio Cruz, que se refiere tanto al femenino como al masculino: La niña cruz es una devota de la Virgen de Fátima. Don Cruz es un campesino que siembra hortalizas..

Pero en sí la palabra “Cruzada”, con mayúscula inicial, hace referencia a una expedición guerrera contra los infieles o herejes, generalmente a iniciativa del Papa, que concedía indulgencias a los que en ellas participaban.

En el interesante libro El Salvador, historia de los pueblos vías y ciudades, Volumen 3, Departamento Editorial del Ministerio de Cultura, San Salvador, 1957, del historiador nuestro don Jorge Lardé y Larín, se lee lo siguiente:

“En nuestro país celebran con alegría y entusiasmo el Día de la Cruz en la población de Santa Cruz Michapa, donde varias familias de ladinos fundaron en los comedios del siglo XVIII la aldea de Michapa, a orillas del camino real que de San Salvador conducía hacia Cojutepeque”.

“Como tal aldea es citada ya, en 1807, por el corregidos intendente don Antonio Gutiérrez y Ulloa, quien apunta que muchos de sus vecinos vivían esparcidos ‘en varios sitios de ganado y maíces’”.

“En diciembre de 1859 el valle de Michapa era uno de los más prósperos y eficientes del departamento de Cuzcatlán, en la comprensión municipal de Cojutepeque”.

“El nombre de este valle, en idioma náhuat significa literalmente ‘río de los peces’, ya que proviene de ‘mich’, pez, y ‘apa’ río. En 1890 Santa Cruz Michapa tenía 1600 habitantes”.

Que el Día de la Cruz, pues, nos sirva para reflexionar acerca de lo bueno, de lo útil y de lo sagrado de nuestras vidas -tan efímeras-, y que Jesús de Nazareth nos bendiga hoy mañana y siempre. Que así sea.

Columnista