Ignorancia, prepotencia y mentiras

¿Aprenderán la lección los funcionarios que la mentira tiene patas cortas, que la única manera de esconder la ignorancia es pensando antes de hablar o escribir y que imitar la prepotencia de Bukele está cada vez más llevando al país a convertirse en un Estado fallido?

descripción de la imagen
Fotos cortesía

Por Teresa Guevara de López

2022-01-22 3:48:25

Ignorancia, prepotencia y mentira son tres características del régimen bukelista. La prepotencia del presidente, con la que pretende encubrir su ignorancia en temas trascendentales para el país se transmite a sus funcionarios, que no pierden oportunidad para alabar a su amo y humillar a quienes no están de acuerdo con sus absurdas decisiones.
Bukele prometió justicia a las víctimas de El Mozote, pero no permitió el ingreso del juez Guzmán a las instalaciones militares para obtener los archivos. Y la poca vergüenza para proclamar a que los Acuerdos de Paz fueron una farsa, aunque internacionalmente fue desmentido por los personajes y las instituciones que apoyaron, durante más de dos años, el proceso.

El ministro Alabí, sin importarle que sus mentiras poco abonan a su condición de médico, aseguró que en el país no circulaba el ómicron, aunque un día después afirmara que desde diciembre el MINSAL tenía pruebas de la presencia de esa cepa en el país. Y que los miles de salvadoreños esperando inútilmente una prueba demuestran la pésima manera como la pandemia ha sido manejada.

Pena ajena y temor por el futuro de la economía ante las desalentadoras opiniones de especialistas internacionales, como el Dr. Hanke, de Johns Hopkins, la agencia de bolsa especializada Amherst Pierpoint y la revista The Economist sobre la posibilidad de que el país caiga en un impago, por la desproporcionada deuda pública y que el FMI afirme que no hay acuerdo sobre los $1,300 millones. Pero el ministro de Hacienda no teme caer en ridículo al afirmar que continúan las negociaciones y que son voces desestabilizadoras del gobierno las que afirman que el acuerdo fue cerrado.

La diputada Marcela Pineda revela su falta de conocimiento, al considerarse ofendida por la Lic. Aguilar, al creer que una conocida frase del expresidente Pepe Mujica se refería a su persona y demandarla ante la FGR. Como la jueza desestimó la demanda, fue removida por los funcionarios que prefieren apoyar una mentira, para no quedar mal con el dictador y sus diputados. Pero Pineda reincidió poniendo en Twitter: “Estoy segura que Monseñor Romero, Ellacuría o Rutilio Grande sabían que el centro de los Acuerdos de Paz era el pueblo y todas las víctimas del conflicto”. No sabe la diputada que los Acuerdos se firmaron en 1992, cuando ya las personas que menciona habían muerto. El padre Grande en 1977, Monseñor Romero en 1980 y el padre Ellacuría en 1989.

El Bitcoin permite toda clase de mentiras, a diario desmentidas internacionalmente. Según Bukele con las grandes ganancias obtenidas ha construido el hospital de mascotas. Pero la realidad indica que la pérdida del país ronda ya los $12 millones, dada la volatilidad del criptoactivo. Kazajistán es un ejemplo real de lo nocivo del Bitcoin. Siendo un país con abundante gas natural y otros importantes recursos naturales, se convirtió en el lugar ideal para desarrollar la minería del Bitcoin, paraíso para bitcoiners de todo el mundo, asegurando a los ciudadanos que estas operaciones disminuirían el costo de la energía eléctrica. Pero la realidad ha sido un fuerte incremento del costo de la electricidad y grave escasez del gas natural, lo que ha generado grandes protestas de la población, que el gobierno totalitario ha reprimido de manera sangrienta. Y como resultado, un desplome del Bitcoin a su precio más bajo.

¿Aprenderán la lección los funcionarios que la mentira tiene patas cortas, que la única manera de esconder la ignorancia es pensando antes de hablar o escribir y que imitar la prepotencia de Bukele está cada vez más llevando al país a convertirse en un Estado fallido?

Maestra.