La Comisión Internacional sobre Personas Desaparecidas (ICMP, por sus siglas en inglés) es una organización intergubernamental con sede en La Haya, Países Bajos. Su mandato es asegurar la cooperación de los gobiernos y otras instituciones en localizar personas desaparecidas a raíz de conflictos, abusos de derechos humanos, desastres naturales y causados por el hombre, crimen organizado, migración irregular y otras causas, con la visión humanitaria de asistir a los familiares de las víctimas. El Salvador es signatario del Tratado Constitutivo desde noviembre de 2015. ICMP ha acompañado desde 2012 los esfuerzos de Búsqueda de Niños y Niñas Desaparecidos durante el Conflicto Armado.
ICMP es la única organización internacional que tiene como propósito exclusivo trabajar en el flagelo mundial de personas desaparecidas. Nuestro país no es ajeno a él, reconociéndose que el esfuerzo prioritario de las autoridades correspondientes actualmente se centra en atender la problemática de personas desaparecidas en los casos derivados de la criminalidad generada por las pandillas y del fenómeno migratorio, los cuales trascienden al ámbito nacional y requieren un abordaje regional. Fiscalía registro en 2018 más de 3,500 casos de personas desaparecidas. Se reportan 1,585 personas en lo que va del 2019 (7 de cada 10 son menores de 30 años).
En fecha reciente, honrosamente la Junta de Comisionados de ICMP me nombró Comisionada ante su máxima instancia de gobernanza, en la cual se diseñan políticas, fortalecen capacidades institucionales y se provee asistencia técnica a nivel mundial en localizar, recuperar e identificar personas desaparecidas.
Siendo el único Comisionado Latinoamericana de ICMP, veo la oportunidad de un asocio estratégico que sume el conocimiento y la experiencia técnica y científica de dicho organismo a los esfuerzos nacionales, tanto: 1) para el futuro Centro de Investigación Forense a ser financiado por el Gobierno de Estados Unidos y la Fundación Buffett, estableciendo un flujo de trabajo específico en el laboratorio de perfiles genéticos de ADN, así como 2) para los significativos esfuerzos del Instituto de Medicina Legal, reconociendo la complementariedad que tendrá el accionar de ambas instancias en el abordaje científico de la problemática de personas desaparecidas.
Lo anterior será posible en la medida en que se cuente con un marco legal robusto que defina claramente los roles y funciones que desempeñará cada instancia, que salvaguarde los respectivos protocolos de acceso, privacidad y manejo respecto de la información que se procese y que asegure la consolidación sobre base científica y tecnológica de un registro único de personas desaparecidas, evitando con ello la dispersión de esfuerzos institucionales y más bien, los enfoque en el bienestar de la sociedad en general.
La experiencia y el conocimiento de ICMP permitirían ofrecer experiencia especializada en lo siguiente:
1. Asesorar en el diseño e implementación de un flujo de trabajo en Laboratorio con un proceso robusto para garantizar el éxito y la sostenibilidad de las pruebas de ADN en los casos de personas desaparecidas;
2. Ofrecer orientación sobre un sistema de gestión de control de calidad basado en estándares internacionales y mejores prácticas, a fin de garantizar resultados precisos y fiables que constituyan evidencia sólida en procedimientos judiciales;
3. Implementar la secuenciación masiva en paralelo (MPS), la cual es una tecnología forense emergente que puede resolver casos irresolubles debido a las limitaciones de los sistemas tradicionales de análisis de ADN;
4. Brindar capacitación personalizada a los científicos salvadoreños;
5. Proporcionar acceso a su Sistema de Gestión de Datos de Identificación (iDMS), software especializado desarrollado por la ICMP para gestionar programas a gran escala de personas desaparecidas, que almacena, ve, comparte y analiza grandes cantidades de datos sobre personas desaparecidas y procesos de investigación con una cobertura supra nacional;
6. Asesorar sobre la creación de mecanismos para la implementación de políticas de protección de datos, para garantizar que los derechos de las familias de las víctimas estén protegidos; y
7. Apoyar a las instancias nacionales en establecer el marco legal necesario para la adecuada incorporación de procesos, protocolos y tecnologías vinculadas al funcionamiento de las ciencias forenses.
En recientes reuniones sostenidas con Su Eminencia el Cardenal Gregorio Rosa Chávez, el Fiscal General de la República, el Diputado Rodrigo Ávila, la Magistrada Doris Luz Rivas, el Director de Medicina Legal, Comisionados de la Policía Nacional Civil, el Coordinador de INL de la Embajada de EEUU, la Fundación Buffett y el PNUD, he podido constatar el compromiso institucional que existe en fortalecer los esfuerzos y mecanismos de coordinación en atender de manera eficiente esta dura temática, existiendo además el reconocimiento de las implicaciones regionales que dicha problemática conlleva. Continuare reuniones con representantes de la sociedad civil.
Proporcionar evidencia científica sólida, basada en el análisis de muestras de ADN para la identificación de personas desaparecidas, es a mi parecer, el camino más efectivo para promover un cierre que lleve alivio a los familiares de las víctimas, así como un mecanismo institucional en la consecución de la verdad y la justicia, tanto por el bienestar de las familias como de la sociedad en general, eliminando además, la discrecionalidad de la prueba no científica.
Considero vital asimismo, que todas las instituciones involucradas adopten como premisa de trabajo, un abordaje ético y humanitario, con un componente humano transversal, que evite la revictimización de quienes ya sufren por la desaparición de un ser querido, reconociendo al efecto, las acciones que está llevando adelante la Unidad de Personas Desaparecidas recientemente creada por la Fiscalía.
Para lograr resultados tangibles es indispensable el esfuerzo conjunto entre las distintas instancias nacionales, tanto de Gobierno, de los Poderes Legislativo y Judicial, así como de la Sociedad Civil, esperando, con alto sentido de compromiso y responsabilidad, incorporar ICMP como socio estratégico de los actuales esfuerzos nacionales, lo cual constituiría un valor agregado de calidad en la incorporación de experiencia, conocimiento y tecnología de los más altos protocolos y estándares a nivel internacional.
Continuaremos apoyando esta iniciativa, la cual en distintos aspectos ha sido posible gracias a la oportuna gestión de la Embajada de nuestro país ante el Reino de los Países Bajos. Ofrecemos la activa participación de ICMP en apoyo a las instancias nacionales que abordan el flagelo de personas desaparecidas, brindando a nuestro país y a la región latinoamericana, un aliado único en el afán de aliviar a cientos de personas que enfrentan la dura desaparición de un familiar.
Excanciller de la República y Comisionada de la ICMP.