¡No te gusta tu empleo? Es momento de cambiarte

Hay diversas razones que pueden llevar a un colaborador a renunciar a su trabajo, pero determinar si es el momento adecuado y si está tomando la decisión correcta, es una tarea difícil. ¿Cómo saberlo? Un experto en talento humano, indica algunas señales claves para hacerlo de forma segura y feliz.

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Si tienes las posibilidades de renunciar y eso traerá un cambio positivo a tu vida, hazlo,. Foto EDH/Archivo.

Por Tania Urías

2018-07-07 10:10:01

Suena la alarma y es el momento de levantarte para iniciar el día, sino no sales de la cama con gusto y te dispones a prepararte para tu jornada laboral, sino que por el contrario la idea de comenzar un nuevo día te produce una profunda ansiedad, y además un malestar generalizado, es un signo importante de que hay algo en tu empleo que ya no te está gustando.

“Una de las primeras alertas de que a una persona ya no le gusta su trabajo, es que puede sentir una sensación de insatisfacción generalizada solo con la simple idea de ir a trabajar”, explica el licenciado Tulio Magaña de la empresa Avance y Desempeño, experta en talento humano.

Hay que aclarar que de vez en cuando podemos experimentar este síntoma y es normal, el problema, advierte el experto, es que sea una sensación demasiado frecuente.

Otras alertas son las continuas llegadas tarde, el frecuente absentismo, en ocasiones este se justifica por enfermedades reales o imaginarias, y los supervisores o jefes deben estar atentos a esto.

“No siempre el colaborador está fingiendo el estar enfermo, a veces sí puede experimentar síntomas físicos como: gastritis, colitis, trastornos alimenticios, insomnio y más, pero es provocado por el disgusto que le produce su empleo”, advierte el experto.

Un colaborador que no se siente motivado o inspirado y que experimenta monotonía, hastío, fatiga y desgano en cada tarea que recibe, puede estar ante una situación en la que ya el lugar donde se encuentra no es el más adecuado para él.

Por otra parte, según el licenciado Magaña, pudiera ocurrir que el trabajador cambie nominalmente de cargo , pero sin variantes significativas en su trabajo o salario. En este segundo caso, en la práctica, no ha habido cambio de cargo, incluso habiendo cambiado de puesto y eso le generará desánimo.

El crecimiento y desarrollo laboral no necesariamente implica crecimiento jerárquico.

Hay “cambio de cargo” y crecimiento cuando hay nuevos retos, nuevas metas, nuevas formas de hacer las cosas y nuevos aprendizajes, de la mano con el reconocimiento que las organizaciones deben dar a este progreso, sino lo hay, habrá malestar en el empleado.

“Conviene que las empresas que, por su naturaleza, tienen poca movilidad en sus puestos, apunten hacia este enfoque de desarrollo humano y organizacional” señala el profesional.

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Es fácil hablar de superación como un concepto, pero a veces es mejor demostrar con ejemplos que los sueños pueden convertirse en realidad y que hay personas que pueden salir adelante. Esa fue la historia de Nicolás, quien sigue con ganas de aprender y enseñar.

Otra alerta que los jefes pueden identificar de que un empleado no está a gusto, es que se escape de la oficina a mitad de la tarde, o esté siempre mal humorado. En el caso del colaborador, él mismo puede hacer un trabajo de introspección y detectar si está comportándose de manera inadecuada.

“En ocasiones, la insatisfacción va por dentro y no necesariamente se debe a asuntos atribuibles a las organizaciones. En estos casos, el cambiarse de trabajo sólo mejora la situación en la persona durante un corto tiempo, pero pronto vuelve a caer en el mismo estado de insatisfacción vital, debe saberse si el cambio debe ser de empleo o de actitud frente a la vida”, explica el entrevistado.

Un cambio positivo

Una de las primeras cosas que el colaborador debe detectar es de dónde proviene esa insatisfacción, si es de la organización como tal, que no le da incentivos salariales o de promoción, por ejemplo; o le coloca en situaciones de estrés excesivo, con jornadas y horarios extenuantes.

Si el malestar por el contrario, proviene de una mala relación con un colega o jefe, o si tendrá que ver con asuntos que se salen de su control.

También debe tomar en cuenta si la razón por la que quiere renunciar es por la búsqueda de mejores oportunidades de crecimiento y a la vez de salario, por que si estas son las causas, irse lo llenará de profunda alegría.

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Uno de los aspectos más importantes dentro de una organización es la relación entre jefes y colaboradores. De este vínculo, depende el éxito y el óptimo desarrollo de las actividades que realiza la empresa .

Un cambio, señalan los expertos siempre trae una dosis de temor, pero lo importante es saber que aun con cierta incertidumbre, si te sientes capacitado y se te abren las puertas, debes dar el paso, sobre todo si en el empleo actual no te sientes seguro, motivado o satisfecho.

Hay diversos signos que pueden ayudarte a descubrir si en verdad ya no te gusta tu trabajo y es momento de irte a buscar uno nuevo y que esto sea un cambio positivo. Descubre algunos puntos claves, según el experto.

¿Cómo saber si es la decisión correcta?

La decisión de cambiarse es un paso importante, que debe realizarse tomando en cuenta, no sólo la emoción, sino la razón.

Según el experto, no hay un estándar definido de tiempo en el que una persona, después de haber permanecido en el mismo puesto y que quiera cambiarse de cargo o de trabajo. En realidad, no se trata tanto de cambiar de puesto sino más bien de alcanzar nuevas responsabilidades, de emprender nuevos retos, de generar nuevos proyectos para el área e ir creciendo en experiencia, logros y consecuciones. Una persona que, por ejemplo tiene cinco años de realizar las mismas funciones, no tiene acumulados cinco años de experiencia, sino un año de experiencia repetido cinco veces.

10 signos a tomar en cuenta

1- La sola idea de que llegó el lunes te produce enojo y una profunda ansiedad y prepararte para ir a tu empleo, es una tarea titánica.
2- Malestar ante la necesidad de desarrollo y crecimiento. las personas en las organizaciones esperan desarrollarse; no desean realizar las mismas tareas todo el tiempo, ya que esto les produce fatiga y falta de inspiración.
3- La escasa rotación, cuando es común en una empresa el ir creciendo en la escala jerárquica, puede generarse una sensación de estancamiento si se lleva ocupando el mismo puesto durante muchos años.
4- El salario actual no cubre las necesidades económicas que cada día suman más como la llegada de un hijo, un matrimonio o una deuda.
5-Residir o cambiarse a un domicilio muy distante de las instalaciones laborales
6- Haber obtenido una titulación en un área profesional diferente de la que se está laborando
7-Horarios extenuantes que obligan a trabajar 12, 14 0 más horas laborales por día, o fines de semana.
8-Malas relaciones con jefes o superiores, puede ser un indicador de que está llegando el momento de emigrar de ese empleo, hacia otro distinto.
9- Preparación extra que no es tomada en cuenta en el empleo actual, puede generar que tu como colaborador te decidas a buscar otra opción que te permita aportar más.
10-Una oferta laboral más tentadora, que se suma a un ambiente en el que no te sientes del todo satisfecho, te puede llevar a tomar la decisión de irte.

Pasos a seguir:

-Toma la decisión personal y luego Compártela con la familia cercana.

-No te vayas, sin antes tener otra oferta, a menos que tus ingresos te lo permitan o el nivel de insatisfacción sea insoportable.

-Regístrate en empresas de colocación de talentos ( en caso de no tener un empleo nuevo).

-Prepara una carta de renuncia clara y respetuosa.

.Despídete de colegas y jefes de la manera más cortés

-Deja todo en orden.