La baja producción de leche en Nicaragua y el aumento de precios de lácteos puede representar una oportunidad para los productores de leche salvadoreños que quieren recuperar el mercado. Sin embargo aseguran que esto solo podría lograrse a mediano plazo y bajo ciertas características de apoyo al productor local.
Según ganaderos, el precio de la botella de leche sigue a un precio muy bajo mientras que el costo de los insumos para alimentar y vitaminar a las vacas sigue elevándose.
“Esta coyuntura es una oportunidad y es un reto, porque la vaca no le da leche de un día para otro, como por decir hoy quiero que la vaca me dé 100 botellas más, porque uno la puede incentivar, pero los resultados se tardan semanas y a veces hasta meses y para nosotros como ganaderos nacionales es un reto, para volver a producir lo que nosotros estábamos habituados a producir, es decir volver a recuperar el mercado nacional, pero a mediano plazo”, explicó Iliana Mondragón, secretaria de la Asociación de Ganaderos de El Salvador (Ages).
El incremento en los precios de lácteos se deben a que Nicaragua está endureciendo sus normas fitosanitarias para exportar sus productos porque quiere entrar a otros mercados en Centroamérica, informó este jueves el presidente de la Asociación de Productores de Leche de El Salvador (Proleche), Alfonso Escobar.
“En Nicaragua se están haciendo más estrictos los controles que hay para permisos de exportación de lácteos, debido a que quiere exportar a otros países, pues solo a El Salvador le exporta lácteos, pero para acceder a otros mercados tiene que de verdad cumplir con normas fitosanitarias que deberían existir desde hace años y es lo que hemos venido reclamando nosotros los ganaderos salvadoreños”, explicó Escobar.
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Pero aunque los precios de lácteos se han ido para arriba, los ganaderos enfatizan que no son ellos quienes están percibiendo ganancias, sino quienes comercializan los lácteos, ya que la botella de leche apenas ha aumentado $0.02.
Por su parte Proleche emitió este 20 de enero un comunicado en el que explica además que “a los productores de leche a nivel nacional únicamente se les ha incrementado entre un 2 % y un 6 % el precio de la botella de leche, lo que contrasta con que los costos de producción han tenido un alza de aproximadamente un 35 % y un 40 % de los insumos y materias primas que utilizan en el mantenimiento del ganado, lo que ha generado crisis en el sector, informó Proleche.
Por su parte, el ganadero Roberto Vides está de acuerdo en que toda esta problemática debería ser una oportunidad para los ganaderos locales, sin embargo las cosas no son tan fáciles.
“Estos mercados se comportan de una forma lenta, porque lo primero que sube de precio es el queso, pero para que ese incremento en la cadena de valor llegue a los ganaderos tarda cierto tiempo en que las cosas se vayan ajustando y definitivamente muchos ganaderos no están viendo incremento en el precio de la botella de leche que les permita una sostenibilidad”, explicó el ganadero.
Sobre el incremento del precio de los insumos, Mondragón detalló que un saco de concentrado que en enero de 2020 costaba $18, ahora cuesta $25 “y de menor calidad para alimentar nuestro ganado; el sulfato que antes costaba $10.30, ahora vele $32, una urea que antes costaba $22, ahora cuesta $72”, detalló.
Según explica la secretaria de Ages para que una vaca dé leche debe ser alimentada y cuidada por dos años y medio, 20 meses para que esté en edad de preñarla y nueve meses de preñez.
¿Qué esperan del gobierno?
En el comunicado los ganaderos hacen, nuevamente, el llamado que por años han venido haciendo al gobierno para que ayude a levantar al sector ganadero que está en crisis por el alza de importaciones nicaragüenses que se han incrementado sustancialmente en los últimos años.
“El problema, y lo hemos dicho siempre, es que aquí no se ha apoyado al ganadero, al productor local, sino a las importaciones. Y aunque nos convenga la reducción de la importación de quesos de Nicaragua sería una oportunidad si eso se mantiene, sino es algo pasajero, hasta que el sector ganadero local tenga tiempo para levantarse y se vendan nuestros productos y se estabilicen los precios”, explicó el presidente de Proleche.
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Mondragón cuestiona que ya es tiempo que el gobierno apoye al productor nacional, que es una petición que han hecho por años.
“Esto se lo hemos repetido a los diferentes ministros que han estado, porque se previó que en algún momento hubiera algún problema con las importaciones, entonces lo importante en un país es asegurar su soberanía alimentaria y no depender de las importaciones, sino apoyar al nacional, incentivar al nacional para que produzca y no dependamos de nadie y evitar lo que está pasando ahora”, señala la secretaria de Ages.
En este sentido Mondragón señala dos cosas que el gobierno debería hacer para apoyarlos: que mantenga los controles fitosanitarios de los lácteos que entran a El Salvador de forma exhaustiva en las fronteras y que apoye con la compra de concentrados.
“Si el gobierno fue capaz de hacer esas compras millonarias de alimentos, en el tiempo de emergencia, para el PES (Programa de Emergencia de El Salvador), entonces de la misma manera el gobierno podría hacer eso en función del ganadero, es decir que el gobierno compre cantidades de soya, de maíz amarillo, que son las bases para alimentar nuestro ganado y nos las venda a los ganaderos quitando al intermediario que es el que se lleva la mayor parte de las ganancias”, señaló Mondragón.
Según dijo estas sugerencias se le han hecho al ministro de Agricultura y Ganadería, David Martínez, pero a la fecha no ha habido una respuesta concreta.
Las promesas del gobierno
El pasado 20 de enero, el ministro de Agricultura visitó la frontera el Amatillo, en La Unión para verificar la agilización de los procesos de muestreo y junto a representantes del Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (OIRSA) se comprometieron a verificar que no entren lácteos contaminados.
“Estamos junto con OIRSA, para garantizar que los tiempos de espera en la frontera serán menores y que actualmente se realiza la microbiología, pero que se ampliarán los exámenes que se hacen, para detectar la presencia de otros metales en los nuevos análisis que se harán, porque este es un tema de salud pública”, dijo el funcionario.
“La agilización de los procesos de muestreo en la frontera El Amatillo es para apoyar a aquellos importadores que sí cumplen con las normas; a quienes no cumplan no se les permitirá el ingreso del producto”, publicó el Ministerio de Agricultura y Ganadería en su cuenta de twitter.
Para los ganaderos es vital que no se baje la guardia con los controles y que esto “no sea una llamarada de tusas”, dijo Mondragón y que el esfuerzo del sector ganadero por recuperar al ganado y el mercado no quede en vano.