Han pasado más de 5 años, dos gestiones municipales que concluyeron y una tercera que inició en mayo de este año y el mercado Hula Hula aún no ve la luz. Tras ocho meses desde que se anunció que sería inaugurado, el primero de tres mercados sigue sin abrir sus puertas a comerciantes y usuarios.
El proyecto que arrancó desde la gestión del entonces alcalde y actual presidente del país Nayib Bukele y que luego retomó el exedil Ernesto Muyshondt aún no despega, pese a un contrato millonario en curso.
El 18 de enero de este año, el todavía alcalde Muyshondt informó que la obra ya tenía “un 98% de avance” y que en los próximos días sería inaugurado. Lo dijo durante la “inspección final” del Mercado Hula Hula, el cual calificó como el “proyecto de mayor inversión en los últimos 50 años en el Centro de San Salvador”.
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Sin embargo, un equipo de El Diario de Hoy realizó un recorrido por el mercado y constató que los locales están vacíos, no hay ventas ni visos de que las haya pronto.
Pero además a los vendedores de la zona tampoco les entusiasma tener un local dentro del mercado, ya que consideran que el pago mensual es elevado para ellos, entre otras razones que exponen.
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El exalcalde detalló que el mercado contaría con 1,000 locales comerciales, videovigilancia, seguridad privada las 24 horas, un Centro de Desarrollo Infantil, clínica médica y un salón de usos múltiples. Pero a la fecha, nada de eso ha sido abierto al público, excepto espacios para parqueos que, según confirmó un equipo de El Diario de Hoy, son alquilados a $1 por vehículo.
“Esta es la primera acción dirigida a dar espacios dignos a los comerciantes informales de la ciudad, pero tenemos el firme compromiso de seguir creando espacios como este que nos permitan dar soluciones dignas tanto a los vendedores como a los capitalinos que realizan sus compras a diario. Porque cumplir es estar cerca de la gente”, expresó Muyshondt ese 18 de enero, a 42 días de las elecciones municipales y legislativas en el país.
¿Qué ha pasado desde esa fecha hasta hoy? El concejal Héctor Silva, del partido Nuestro Tiempo, quien fue electo en los comicios del 28 de febrero de este año, y es parte del concejo capitalino que dirige Mario Durán, de Nuevas Ideas, confirma que el nuevo mercado está estancado.
“En el Hula Hula entiendo que hay un impasse, no sé si de carácter político o qué, pero sigue estancado”, afirma Silva.
Además se gestionó una opinión del alcalde Durán, a través de una empleada de comunicaciones de la comuna, acerca de si en el concejo se ha abordado cuándo será la inauguración del mercado o si hay algún impasse con el proyecto, pero no hubo respuesta.
El Hula Hula es uno de los tres mercados en San Salvador, cuyo contrato ha sido cuestionado por su legalidad y por las condiciones en las que se firmó, ya que iban en perjuicio de los intereses de los capitalinos.
Todo inició con Bukele
En febrero de 2017, siendo Bukele el alcalde de San Salvador firmó un contrato por $91.4 millones con una empresa de Guatemala, la cual se creó cinco meses antes que se lanzara la licitación, para el proyecto de tres nuevos mercados en la capital.
El exconcejal del FMLN, Fabio Castillo, reveló en 2018 a El Diario de Hoy que la aprobación de ese contrato millonario para la construcción de los mercados, entre ellos el Hula Hula, no contó con la aprobación de ley.
Bukele y un grupo de concejales no tomaron en cuenta varios procedimientos de ley para entregar la construcción y usufructo de los mercados a Direct Security Systems (DSS), una empresa que no sólo se convirtió en el socio estratégico para la alcaldía capitalina, sino a la que además se le encomendó por medio de un contrato: el diseño, la construcción y operación de los mercados, cuyas facultades no estaban en las bases de licitación, según documentos en poder de EDH y que fueron publicados en 2018.
El millonario proyecto de los mercados, denominados como “centros comerciales”, arrancó con la Ley de Adquisiciones y Contrataciones de la Administración Pública (Lacap), pero no fue concluido bajo esa normativa, sino que en el proceso el exalcalde Bukele y el grupo de concejales que lo apoyó dejaron de lado la Lacap y el proyecto terminó bajo el amparo de la Ley de Sociedades de Economía Mixta. Es decir, las bases de licitación para la búsqueda del socio estratégico se hicieron mediante la Lacap, pero el contrato se otorgó basado en la ley que data de 1957.
De esa forma, Bukele no solo le entregó a la empresa guatemalteca la construcción de los tres mercados, a través de la Sociedad de Economía Mixta (SEM, formada por la empresa DSS y la alcaldía), sino que además le transfirió la autonomía de administrarlos y operarlos. A eso se añade que la sociedad que llamaron Nuevo Sistema de Mercados se constituyó con una participación del 75% para DSS y solo el 25% para la comuna.
En el contrato se estableció que el mercado Hula Hula tendría un costo de $34.1 millones; el que se construiría en la ex Biblioteca costaría $23.8 millones; y el que harían en la colonia Escalón costaría $33.5 millones, lo que sumaba $91.4 millones.
Sin embargo, Castillo confirmó que la aprobación de ese contrato no obtuvo el debido aval legal en el concejo capitalino, ya que no contó con los votos mínimos requeridos por la Ley de Mercados en su artículo 4, lo cual a juicio de Castillo causa la “nulidad” de dicha aprobación.
El 31 de enero de 2017, el Concejo Municipal aprobó con 8 votos a favor (de 14 posibles) el contrato, pero la ley ordena que para aprobar la construcción de mercados se necesita de dos tercios del total de miembros del concejo, que en este caso debía ser con 10 votos de los 14 concejales y no por 8 como ocurrió.
Muyshondt lo continuó
Aún así, el sucesor de Bukele en la alcaldía de San Salvador, Ernesto Muyshondt retomó el proyecto de los tres mercados.
Aunque en noviembre de 2018 Muyshondt declaró que analizaría con el equipo jurídico de la comuna los contratos para construir los mercados que otorgó la administración de Bukele y si había algo que corregir lo iba va hacer, ya en 2019 el exedil no solo defendió el proyecto de los mercados diciendo que “todo se ha hecho de acuerdo a ley”, sino que en julio de ese año dio el banderillazo de salida para construir el Hula Hula.
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De la mano de la empresa Simerca (Sistema de Mercados de Centroamérica), la cual es parte del Grupo Makensa, Muyshondt dio vida al cuestionado proyecto, aunque en ese momento indicó que ya no costaría $91.4 millones, sino que la inversión por los tres mercados sería de $55 millones.
Makensa fue constituida cuando DSS vende sus acciones y cambia de nombre, luego de que no pudo capitalizar su compromiso y fue absorbida por su casa matriz, transfiriendo el contrato de la empresa autorizada por la comuna a esta nueva sociedad, según confirmaron fuentes de la alcaldía que conocieron el proceso durante la gestión de Bukele.
Pero el factor en común entre DSS, Makensa y Simerca es Enrique Sánchez, de nacionalidad mexicana, quien es representante legal de DSS, de Makensa y presidente de Simerca. De hecho, Sánchez estuvo en la colocación de la primera piedra del Mercado Hula Hula junto a Muyshondt en 2019.
También fue parte de la junta directiva de Simerca, Conan Castro, actual secretario jurídico de la Presidencia en la gestión Bukele, y fue el gerente legal de la alcaldía de San Salvador; de hecho, Castro fue el que creó la Sociedad de Economía Mixta para desarrollar el proyecto de los tres mercados.
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