Educación y salud, principales retos de El Salvador en el índice de progreso social

El Salvador ha tenido avances más lentos en estos indicadores, lo que lo posiciona en los últimos lugares a nivel de América Latina.

descripción de la imagen

Por Magdalena Reyes

2020-11-12 10:15:14

La baja matrícula en educación primaria y secundaria siguen siendo de los principales retos que tiene el país en el Índice de Progreso Social.

Así lo revela el documento titulado: “Cerrar las brechas de progreso social: prioridades y propuestas para El Salvador”, presentado ayer por la Fundación Poma, que junto al Centro de Progreso Social son los encargados del análisis y comportamiento del Índice de Progreso Social (IPS).

VER: El COVID-19 debilitó la economía de los hogares y generó deserción escolar: encuesta de El Salvador Cómo Vamos

En el documento se analiza el país en tres momentos: la evolución del progreso social hasta el año 2019; una apreciación del impacto negativo de la pandemia durante 2020; y las dificultades económicas y fiscales que amenazan el progreso social en el futuro próximo.

“En el nivel de matrícula estamos en el último lugar de América Latina. Otro de los retos es la calidad de educación, poder hacer que los niños tengan acceso a calidad de educación”, se detalla.

El bajo acceso a internet que impide que los alumnos lleguen a los materiales remotos y las altas tasas de criminalidad son de los principales aspectos negativos que revela el informe.

En términos de inseguridad ciudadana, El Salvador se posiciona en el puesto 15 de 17 países.

“Los datos son de 2019, previo a la pandemia y antes que este Gobierno iniciara gestión”, detalló el coordinador del Centro de Progreso Social, Manuel Sánchez Masferrer.

Indicó que el objetivo del informe es ofrecer alternativas para aumentar el IPS de los salvadoreños.
El investigador destacó que el IPS está compuesto de varios indicadores agrupados en 12 componentes que representan diferentes aspectos del bienestar.

“En ese índice El Salvador está en la posición 14 de entre los 17 países de Latinoamérica y a nivel mundial está en la posición 94 entre 164 países”, explicó Sánchez Masferrer.

Esto significa que el país tiene un progreso social medio bajo, ya que a nivel de Latinoamérica únicamente está mejor posicionado que Guatemala, Honduras y Nicaragua.

Hace 10 años estaba en la posición 85, pero esto se debe a que los demás países han avanzado de manera más rápida.

Necesaria inversión social
En un contexto impactado por el COVID-19, que ha exigido mayor gasto para atender la pandemia y ante la apremiante situación fiscal, no se puede dejar de lado invertir en lo social para no comprometer los niveles alcanzados en el IPS, indicó el experto.

ADEMÁS: Más de 44 mil estudiantes han abandonado los colegios privados debido a la difícil situación económica

“Estamos relativamente rezagados en comparación a la región, por eso es importante mantener aquellas cosas que son claves durante este periodo difícil en términos económicos”, apuntó.

Por su parte, el vicepresidente de Fundación Poma, Alejandro Poma, destacó la importancia del documento que están presentando.

“Además de estudiar los principales indicadores de bienestar a través de la metodología del Índice de Progreso Social (IPS), este documento es un esfuerzo que pretende brindar propuestas de política pública, basadas en un análisis técnico, objetivo y ejecutable”, subrayó Poma.

Agregó que desde el inicio de la pandemia, la Fundación Poma ha tomado un rol protagónico para aliviar necesidades urgentes en comunidades vulnerables y también ha contribuido, junto a organizaciones aliadas como el Centro de Progreso Social y ESEN, a la formulación de soluciones y propuestas en los momentos más críticos.

“Seguiremos poniendo al servicio de El Salvador nuestra experiencia, porque estamos convencidos de la importancia de cuidar los avances en materia de progreso social y evitar retrocesos”, enfatizó Poma.

¿En cuáles indicadores ha mejorado el país?

De acuerdo al análisis, El Salvador es un país con una mortalidad materna relativamente baja en América Latina; la mortalidad infantil también ha disminuido en los últimos 20 años.

Además revela que el acceso a la telefonía celular es otro indicador en los que está bien y que tiene pocas emisiones de gas invernadero.

También se ha mejorado en el goce de los derechos políticos y en el goce de la libertad religiosa.

Sin embargo, son componentes por los que se debe velar que no haya un retroceso, tomando en cuenta que el avance de El Salvador en el IPS ha sido lento, en comparación con los demás países.