Los exportadores de bienes tendrán al menos $1,000 millones menos en sus negocios este año, según los números presentados en los informes del Banco Central de Reserva (BCR) debido al cierre casi total y alargado de las empresas.
Entre enero y noviembre de este año, El Salvador ha exportado $4,530 millones, $964.8 millones menos que en el mismo período del año pasado y la esperanza es que al menos se llegue en estos últimos días a exportar $5,000 millones, según las proyecciones de la Corporación de Exportadores de El Salvador (Coexport) que detalló la directora ejecutiva, Silvia Cuéllar.
A esta baja se le suma la reducción en exportaciones de servicios, en la que empresas como los call centers se vieron seriamente afectadas, dijo Cuéllar.
“El sector bastante golpeado ha sido servicio, pero no ha sido solo en servicios, el turismo es una línea en servicios, logística, call center, ya que mucho servicio es a domicilio, también servicio de mantenimiento de aviones, aeronáutica. El año pasado El Salvador exportó $2,500 millones en servicios, pero este año menos de la mitad; respecto a bienes en 2019 se llegó a $5,900 millones y este año a noviembre llevamos $4,530 millones. Esperamos que al cierre del año lleguemos al menos a unos $5,000 millones”, detalló la representante de los exportadores.
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Para Cuéllar, en estos momentos no se puede hablar de crecimiento para los exportadores, sino de una lenta recuperación, ya que el cierre económico retrasó los negocios de muchas empresas.
“Se ha ido recuperando el terreno, si una empresa tiene compradores y ellos reconocen la calidad, entrega, servicio, seguramente se hará lo imposible de que esa relación comercial siga… pero aquí no es de crecer es de estar recuperando terreno, porque hemos sido el país que más ha bajado en la región, porque aquí se cerró casi todo y lo poco que se ha recuperado es porque las empresas se han esmerado”, señaló la directora ejecutiva de Coexport.
Según el último informe del BCR, El Salvador exportó $444 millones en noviembre 2020, siendo el quinto mes del año en el que se logran valores similares o superiores a los registrados previo a la pandemia por COVID-19, sin embargo en el acumulado se proyecta una caída de al menos 15.5 %, explicó la representante de los exportadores.
La oportunidad
A pesar de todas estas pérdida las empresas deben seguir adelante buscando las oportunidades y las buenas alternativas que se están desarrollando, una de ellas es la industria naranja, a través de la innovación.
“Lo que tenemos que aprovechar desde ya es de ver cómo se hacen centros de innovación, la tecnología, las TICs, hablar de eso es hablar de comercio y de negocios”, dijo Cuéllar.
También hay oportunidad para los tradicionales, ya que si los rubros fuertes en El Salador son textil y confección, la oportunidad está en crear prendas que se adapten a las exigencias mundiales, señaló Cuéllar.
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“Es bueno decir que vamos a crecer, pero esto no es tan fácil, la industria de la moda tiene que pensar en otras prendas, pongo un ejemplo: si hacés teletrabajo querrás siempre ropa presentable, pero más cómoda, entonces pensar qué tipo de prendas de vestir debo producir de acuerdo a las tendencias mundiales”, agregó la experta.
Cuéllar también indicó que el sector industria de muebles tiene gran oportunidad por lo mismo, por la comodidad que ahora se necesita para trabajar desde casa y también del lado de maquinaria deportiva.
En cuanto a las importaciones de mercancías, los datos indican que han acumulado un total de $9,508.6 millones al cierre de noviembre, de las cuales los bienes de consumo representan el 40.7% con $3,870.9 millones; los bienes intermedios el 38.4% ($3,652.6 millones); los de capital 16.2% ($1,539.9 millones); y la maquila un 4.7% del total, es decir, $445.2 millones.
Pese a que todos los rubros experimentaron contracciones, los sectores agropecuario, servicios y electricidad aumentaron sus compras de bienes de capital al resto del mundo.
Empresas necesitan condiciones para crecer y que haya sostenibilidad fiscal
La directora ejecutiva de Coexpor apuntó que el país necesita condiciones para que se desarrolle un crecimiento y una condición fundamental es que el gobierno invierta y desarrolle políticas públicas para ello.
“Necesitamos una inversión privada de $600 millones en ampliar negocios, crear nuevas empresas, mejorar procesos para generar mayores ventas, porque necesitamos que la gente tenga empleo; pero también se necesita crear el ambiente para eso para que una empresa quiera seguir invirtiendo en este país o que venga otra empresa a invertir, por tanto, el gobierno debe trabajar en que esas condiciones se den”, expresó.
Además, la directora ejecutiva de Coexport observa con preocupación las deudas que ha adquirido el gobierno y además el proyecto del Presupuesto 2021.
“El país necesita sostenibilidad fiscal y caminar hacia el tema tecnológico y además preocupa el tema del presupuesto, porque para empezar vimos que no había una partida para el IVA exportador, pero si el exportador paga, lo menos que se debe hacer es devolverle el dinero; vemos demasiado presupuesto contra un ingreso que no se percibe, no podemos seguir enjaranándonos, porque estamos enjaranando hasta a los bisnietos”, señaló Cuéllar.
La ejecutiva recalcó que las empresas que están saliendo adelante es porque a pesar de todas las bajas en sus ventas también han invertido en empaques adecuados, en protocolos de bioseguridad, en capacitaciones, etc, pero no ven incentivos ni mejoras en la generación de negocios.
“Se deben crear las condiciones para los exportadores, porque el que quiere exportar más necesita invertir”, dijo Cuéllar, quien no dejó de lado que sigue sin resolverse el tema de la tramitología, porque aunque se avanzó, todavía hay dificultades que le restan siempre competitividad al país y esto no puede permitirse, ya que se necesita atracción de mercados.