¿En qué utilizaron las alcaldías los préstamos que adquirieron en 2018?

Los proyectos de electrificación rural y urbana e infraestructura vial ocuparon el segundo lugar en los destinos de préstamos en 2018, pero solo representan el 14.4 % del total de la deuda contratada por municipalidades.

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El 75 % del dinero que el gobierno entrega a las alcaldías en concepto de FODES debe ser utilizado para la inversión. / Foto Por Archivo

Por Vanessa Linares

2019-03-27 10:16:00

El 73 % de los créditos adquiridos por las alcaldías en 2018 fue para la consolidación y reestructuración de sus deudas, confirmó el Ministerio de Hacienda en su informe anual sobre la situación del endeudamiento público municipal.

De acuerdo a los datos oficiales, entre el 1 de enero y el 31 de diciembre del año anterior, las alcaldías adquirieron préstamos por un total de $94.5 millones. Gran parte de ese dinero, unos $69.7 millones, fue utilizado para pagar o refinanciar las deudas que ya tenían.

El 93 % del valor total contratado y destinado a consolidar deudas de largo y corto plazo se concentró en municipios de siete departamentos del país.

$532 Millones

Fue el saldo total de la Deuda Pública Municipal al 31 de diciembre de 2018. La cifra equivale a un 3.6% mayor al saldo final en 2017.

En un segundo lugar de destino del crédito, distante por mucho del primero y representando apenas el 7.2 % del total de la deuda contratada el año pasado, los gobiernos locales utilizaron alrededor de $6.8 y $6.7 millones para proyectos de infraestructura vial y de electrificación rural y urbana. Vale la pena mencionar que en 2016 y 2017, las alcaldías destinaron más de $16 millones solo para calles y caminos.

El informe de Hacienda detalló que los créditos contratados durante el año pasado estuvieron destinados para atender diferentes necesidades y prioridades definidas por cada uno de los municipios. De esa manera, el documento reveló que en apoyo al desarrollo económico, proyectos de educación, fortalecimiento institucional, compra de maquinaria y equipo (como transporte de desechos sólidos, vehículos y mobiliario y equipo de oficina), saneamiento ambiental y tratamiento de desechos sólidos, infraestructura y equipamiento para deportes y recreación y otros no especificados, las municipalidades destinaron entre $1 y casi $2 millones en cada uno; el equivalente al 1 o 2 % de los recursos provenientes de los créditos.

Los proyectos de agua potable y alcantarillados, los proyectos turísticos, de vivienda, obras de mitigación o los de fortalecimiento del sector agrícola, obtuvieron recursos pero ninguno de estos llegó a representar apenas el 1 % del total del dinero contratado a través de préstamos.

San Salvador ($10 millones), Santa Tecla, Usulután, Antiguo Cuscatlán y Santiago de María ($7 millones) son los cinco municipios de El Salvador que contrataron los mayores montos de crédito durante el 2018.

Las entidades financieras a las que las municipalidades más pidieron créditos fueron empresas privadas como las que conforman al grupo Fedecrédito (37%), el Banco de los Trabajadores (18 %) y bancos privados (17 %). Por otra parte, en representación de la banca estatal los créditos provinieron del Banco Hipotecario, principalmente.

Cabe destacar que la tasa de interés promedio fue de 10.6 % y el plazo para pagar fue pactado en 158 meses en promedio.

En total, los gobiernos locales de El Salvador obtuvieron desembolsos por más $105 millones en 2018, pero unos $14.6 millones de esos provenían de préstamos que fueron contratados entre 2014 y 2017 porque las condiciones establecidas determinaron que se harían efectivos de manera parcial según el grado de avance de los proyectos.

De los $94.5 millones contratados específicamente en 2018, las municipalidades solamente recibieron $90.4 millones en concepto de desembolso.

Por otra parte, el servicio de la deuda, es decir los montos que las municipalidades erogaron para atender el pago de amortización al capital y los intereses de lo que debían, ascendió a $138.9 millones.

Los municipios que realizaron los mayores pagos pertenecen a Usulután, La Libertad, San Salvador y Sonsonate. Mientras Santa Ana, y Sonsonate fueron los departamentos cuyos municipios pagaron más amortizaciones, y Cabañas y La Paz fueron los que abonaron más dinero en concepto de intereses.

Pero, aunque pagaron parte de sus créditos, las 262 alcaldías cerraron el 2018 con un saldo total de Deuda Pública Municipal equivalente a más de $532.2 millones, un 3.6 % ($18.4 millones) más que el saldo final de 2017.

Cabe mencionar que el 44.5 % (unos $237.1 millones) del saldo total de la deuda municipal salvadoreña corresponde a las obligaciones financieras de las comunas clasificadas como pequeñas, de tipología 4 o 5. Estos municipios se pueden describir como aquellos con un nivel medio-bajo o bajo de desarrollo, primordial o eminentemente rurales, con algunas o todas sus necesidades básicas insatisfechas y que tienden a ser o ya son municipios relativamente pobres.

Con un pendiente de $112.02 millones (21 % del total), San Salvador es el departamento que agrupa a los municipios que suman los mayores saldos de la deuda; le siguen La Libertad ($68.96 millones), Usulután ($62.92), La Paz (45.89) y San Miguel, en quinto lugar, con $43.04 millones.

“Entre los municipios que conforman estos departamentos que tienen los mayores montos de deuda se encuentran: San Salvador, Santa Tecla, San Miguel, Sonsonate, Ilobasco, La Libertad, Jiquilisco, Usulután, Zacatecoluca y Sensuntepeque, que en conjunto suman $181.9 millones. Por su parte los diez municipios que reportan los menores saldos de deuda son: San José las Flores, Nueva Concepción, Colón, Ayutuxtepeque, Tecoluca, San Rafael Cedros, Potonico, Chirilagua, Chalchuapa y Las Vueltas”, apuntó el Ministerio de Hacienda en su documento.

Recursos insuficientes

La deuda municipal total equivale al 2.08 % de la economía salvadoreña medida a través del Producto Interno Bruto (PIB). En ese sentido, para “apoyar el desarrollo y la autonomía económica de los municipios”, el año pasado el gobierno transfirió a las comunas el 8 % de los ingresos corrientes netos del Presupuesto General del Estado.

Con este Fondo para el Desarrollo Económico y Social de los Municipios de El Salvador (Fodes) transferido a través del Instituto Salvadoreño de Desarrollo Municipal (ISDEM), las municipalidades están facultadas para utilizar el 75 % para inversión y el 25 % en gastos de funcionamiento.

No obstante, los datos de Hacienda observan que en el último quinquenio el incremento porcentual del saldo de la deuda pública municipal es mayor al que ha seguido el incremento porcentual del Fodes en inversión.

De esa manera, por ejemplo, lo que recibieron las alcaldías en 2018 bajo el concepto de Fodes representó menos de la mitad del saldo de la deuda final.

¿Cuánto le tocaría a cada habitante? Según Hacienda, si el monto total que deben todas las alcaldías se dividiera entre el número de habitantes de cada municipio, en promedio a cada salvadoreño le correspondería pagar $85.9.

Los habitantes de Usulután, con un promedio de $166.2, serían los que pagaran más; mientras que los ciudadanos de Santa Ana serían los que menos deberían, con $29.3 de deuda por cada uno.

Por otro lado, aunque el departamento de San Salvador es el que mayor nivel de endeudamiento presenta con el 21.0% del total de la deuda, por ser el más poblado del país con el 27.7% de toda la población, tiene una deuda pública municipal per cápita que se ubica debajo del promedio nacional.

Dinero desembolsado