El presidente de la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI), Eduardo Cader, afirma que "será difícil que los inversionistas se metan al remolino del Bitcoin al ser El Salvador el primer país que lo adopta como moneda de curso legal, sin saber cómo va a funcionar".
También el director ejecutivo de la gremial, Jorge Arriaza, indica que una de las características necesarias e importantes para el sector industrial es “la estabilidad monetaria” y apunta que en este momento “hay muchas empresas que necesitan información sobre el manejo del Bitcoin".
Lo expresado por los dirigentes de los industriales en el país se vio reflejado en una encuesta de la Universidad Francisco Gavidia, difundida la semana pasada, que indicaba que la mayoría de salvadoreños rechazan el uso de la criptomoneda y expresan su desconfianza y desconocimiento sobre la misma.
A los comerciantes encuestados se les preguntó si estarían dispuestos a aceptar pagos en Bitcoin y el 67.14 % dijo que no lo recibiría, el 24.29 % que sí lo recibiría, mientras que solo el 3.93 manifestó que le es indiferente y el 4.64 % que no conoce o no respondió.
Asimismo les consultaron cómo se sienten respecto a la decisión de implementar el Bitcoin como moneda de curso legal y el 48 % dijo que con incertidumbre; el 29 % con temor, mientras que solo el 19.8 dijo que optimista y el 2.6 que no sabe.
Salario mínimo
Otro tema que preocupa al sector industrial es el aumento del 20% al salario mínimo que se implementará el próximo mes. "Nos preocupa un poco el tema del incremento del salario mínimo porque llega, de forma sorpresiva, en un momento en que la economía se está recuperando de la pandemia", señala Cader.
El dirigente lamenta que el alza salarial se haya aprobado sin ser discutido. "El año pasado tocaba hacer una revisión pero por la pandemia no se realizó, ahora solo se nos ha informado que va a partir de agosto", reclama.
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Pero además Arriaza apunta que el aumento “llega en un momento en el que estamos en etapa de recuperación económica, pero en una coyuntura de alza de costos, aumento de combustibles y fletes y de materias primas".
Ante todo ello, el presidente de la ASI destaca que se debe de escuchar a los sectores que pueden resultar afectados por las diversas iniciativas que aprueba la Asamblea Legislativa (de mayoría oficialista) “para que se puedan concretar buenas leyes”.
"A nivel político se observan altas y bajas que generan incertidumbre en la población y entre los inversionistas, es necesario tener certeza jurídica", expresa Cader.
Arriaza destaca que en los últimos meses el país ha tenido una etapa de recuperación del sector industrial y que todo apunta a que se tendrá un repunte favorable este año, pero seguir así también depende del respeto a las medidas sanitarias contra la pandemia.