Yesstore, una tienda en línea que combina la creatividad y la perseverancia

Yesenia Romero es propietaria de YesStore_sv, una tienda de prendas deportivas que le ha sacado provecho a la conectividad.

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Foto EDH/ Jessica Orellana

Por Karen Molina

2021-03-08 4:14:03

Hace seis años Yesenia Romero nunca se imaginó que su emprendimiento en línea pudiera tener el alcance que ha logrado hoy día.

En un mes apenas lograba vender tres o cuatro prendas de vestir que ella seleccionaba personalmente y que luego vendía a través de su perfil de Instagram.

Arquitecta de profesión, Yesenia, aprendió a vender con la ayuda de las redes sociales a base de pura prueba y error. La especialización de su negocio, la interacción con sus clientes, la logística para la entrega y la rentabilidad de sus finanzas fueron aspectos que logró mejorar solo con el paso del tiempo.

La joven emprendora cuenta que antes vendía ropa en general y no conocía a ciencia cierta si su negocio era rentable. Sabía que tenía ganancias, pero no cuántas.

En muchas ocasiones sus clientes la dejaban plantada en el lugar de entrega de la mercadería y hubo meses en los que no percibió ninguna ganancia porque antes que vender, necesitaba aumentar su número de seguidores.

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Pero su perseverancia y su creatividad, así como el apoyo de su familia y amigos, le permitieron afinar un modelo de negocios que al a fecha se ha convertido en su segunda fuente de ingresos más importante después de su empleo formal.

Relata que en medio del confinamiento por la pandemia descubrió el enorme potencial que tenía la venta de ropa deportiva, que incrementó su demanda para hacer ejercicio en casa o hacer home office. “Yo veía que buscaban mucha de esta ropa y comencé a enfocarme más en ese rubro de la ropa deportiva”, cuenta.

Yesenia es arquitecta, pero además mantiene un emprendimiento que administra con su teléfono celular. Foto EDH / Jessica orellana

Así que, ayudada con una mat de yoga y unos cuantos accesorios deportivos, armó su propio set de fotografías en la habitación de su casa y solo con la ayuda de su teléfono celular y la luz natural que entraba por su ventana, comenzó a armar conjuntos deportivos para todos los gustos.

No pasó mucho tiempo para que decenas de clientas interesadas en una vida más fitness le reservaran la ropa minutos después de publicarla en su cuenta de Instagram.

“A veces hago historias del proceso para armar los conjuntos y las clientas que ya me conocen me piden que les reserve algunos”, cuenta la emprendedora, quien afirma que en las redes sociales, lo que importa es la experiencia que el cliente tenga al comprar sus productos pues eso logra fidelidad y además difusión de su perfil con otras personas. “No hay mejor publicidad que la de un cliente feliz”, afirma.

Foto EDH/ Jessica Orellana

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Con una mayor demanda, Yesenia estableció horarios de atención y rutas de entrega. Su organización fue clave para destacar en este negocio pues siendo empleada en una empresa privada, debe cumplir con su rol como arquitecta, pero a la vez, debe estar atenta a lo que sus clientas le piden.

La banca en línea fue de mucha ayuda para agilizar sus proceso de venta pues con transferencias electrónicas, puede verificar que el cliente ya pagó el producto y solo se coordina la entrega.

En este punto la joven afirma que vender en línea, a diferencia de vender de forma presencial, requiere de una interacción de confianza con sus clientes pues ellos están dispuestos a dar la dirección de sus casas o números de teléfono para hacer efectiva la entrega.

“La confianza del cliente en este negocio es bien importante. Ellos nos confían sus teléfonos, sus direcciones y hasta sus cuentas bancarias”, dijo la empresaria.

Ahora Yesenia ha conseguido aumentar significativamente sus ventas. Este último año comenzó a pagar publicidad en redes sociales y su sueño es abrir una tienda en línea que le permita mejorar los procesos y darle empleo a más personas.

“No es fácil, pero es un proceso que vale la pena”, dice satisfecha.

Foto EDH/ Jessica Orellana