Francisco R. quien lleva 18 años laborando para una aerolínea en el país, es parte de los salvadoreños que recientemente recuperaron su empleo con la reactivación económica.
El hecho de trabajar para uno de los rubros más golpeados por la pandemia, provocó que el joven estuviera cesado de su empleo durante nueve meses hasta que lo volvieron a llamar a finales de diciembre de 2020.
Aunque regresó a la empresa con la misma modalidad de contrato y condiciones que tenía antes que lo cesaran temporalmente, tuvo que hacer malabares para salir adelante con los gastos del hogar que comparte con su esposa y su hijo de un año.
“Nos mandaron a descansar en febrero. Ese mes todavía nos pagaron pero ya el siguiente mes (marzo 2020) ya no nos pagaron”, recuerda.
Ante la necesidad de ingresos comenzó a hacer viajes de taxi con su vehículo.
Estuvo haciendo viajes pero solo unos pocos meses porque luego ya no pudo darle mantenimiento al auto y tuvo que venderlo.
Empleo formal sigue sin recuperarse pese a reactivación económica
“Gracias a Dios también tenía un dinero guardado que se fue rápido porque tenemos un bebé de un año”, relató.
Ante la falta de recursos, junto a su esposa emprendieron un proyecto de artesanías en madera.
“Nos metimos a eso. Era poco lo que quedaba, pero ya era una entrada de dinero que nos ayudaba”, contó.
Ahora, al regresar a su puesto de trabajo, aún ve con preocupación que muchas personas siguen cesadas de sus empleos.
“Aún hay incertidumbre porque las operaciones en el aeropuerto aún no están al 100 %. Quizá en un 25 % están trabajando porque ha sido uno de los rubros más golpeados”, comentó.
El temor de que los puedan cesar nuevamente persiste porque el rubro aún no se recupera totalmente y hay compañeros de trabajo que aún no regresan con tal de mantener las medidas de distanciamiento entre los empleados.
Los líderes de las principales gremiales empresariales del país mencionan que del respeto de las medidas de bioseguridad depende que la economía se mantenga abierta y se sostengan los empleos que ya han logrado recuperarse.
En el país los sectores de comercio, restaurantes y hoteles, transporte, almacenamiento, actividades de alojamiento y servicios de comida han sido los más golpeados, pasando de generar 206,239 empleos al inicio de 2020 a solo 189,857 al cierre de año, es decir un descenso de 16,382, puestos de trabajo.
Otras ocupaciones como las actividades profesionales, científicas, técnicas y de servicios de administración también estuvieron entre las más golpeadas, bajando de 128,283 a 121,188 plazas.