“Nos parece una medida de muy mal gusto. Convertir al ciudadano en "soplón" del gobierno, en un "ponededo", es una campaña francamente desagradable”, opinó el director ejecutivo de la Cámara de Comercio, Federico Hernández, sobre la medida anunciada este lunes por la Defensoría del Consumidor llamada “Ponele el dedo al especulador”.
El dirigente de la gremial indicó que la mejor forma de ayudar a la economía es “evitando medidas populistas”, como aumentos inconsultos del salario mínimo. El presidente Nayib Bukele anunció el pasado 1 de julio que solicitaría el aumento del 20% al salario mínimo y al día siguiente el Consejo del Salario Mínimo aprobó la medida sin los votos de la empresa privada y sin un estudio técnico sobre la viabilidad de implementar el alza.
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Economistas, gremiales y una reciente encuesta de la Universidad Francisco Gavidia han advertido que el aumento al salario mínimo traerá como consecuencia el encarecimiento de los productos para todos los salvadoreños; el sondeo indica que mientras el alza salarial solo beneficiará a unas 580,000 personas, más de 2.3 millones no recibirán ese beneficio.
“La inflación suele ser resultado del ataque sistemático a los sectores productivos (a los que suele verse como adversarios) y la falta de previsión para combatir los ciclos negativos de la economía global”, señaló Hernández.
La Defensoría del Consumidor presentó este lunes la aplicación “Ponele el dedo al especulador”, disponible para atender las denuncias que hagan salvadoreños por alza de precios injustificados o acaparamiento de productos en establecimientos comerciales ante el anuncio del incremento al salario mínimo. Mediante la APP la ciudadanía tiene la opción de hacer su denuncia de forma anónima o si lo desea puede proporcionar sus datos personales, como nombre, número de teléfono y correo electrónico.
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Al respecto, Hernández indicó que las implicaciones de la medida dependerá del comportamiento de los ciudadanos. “Si los consumidores llegan a creerse el cuento que denunciando comercios van a impedir la inflación, lo que va a terminar pasando es justo lo contrario”, consideró.
Para el dirigente de la gremial, con el actual gobierno ese tipo de medidas “pueden prestarse a cualquier cosa. Sin verdadero Estado de derecho, destruir la reputación de un comercio o una marca es bastante fácil”.
El presidente de la Defensoría del Consumidor, Ricardo Salazar, dijo el lunes que la medida “Ponele el dedo al especulador” es “un mecanismo en el cual la población podrá detallar las características del producto, también la información del proveedor que a su juicio esté especulando con los precios o también con el tema del acaparamiento. Esta información será utilizada para iniciar acciones y deducir las responsabilidad administrativas y/o penales si las hubieren”.
De acuerdo con el funcionario, de verificarse y comprobarse este tipo de denuncias para quienes infrinjan la ley se establecen multas económicas de hasta 500 salarios mínimos o, incluso, hay delitos que pueden incurrir en sanciones de cárcel.