Pescadores y ostreros de El Majahual están sin recursos por pandemia y tormenta
La mayor preocupación que tienen los pescadores y ostreros artesanales es que no saben cómo pagarán los recibos de servicios básicos que se les han acumulado en tres meses.
Los pescadores de El Majahual, en La Libertad, por ahora han guardado sus lanchas, sus redes y su energía para salir mar adentro a buscar el sustento diario.
La razón es que en estos días lo único que logran es poner en riesgo el equipo de pesca porque las tormentas Amanda y Cristóbal que recientemente azotaron al país han llenado el mar de basura, árboles y demás desechos.
“Los efectos luego de una tormenta normal pueden durar 15 días, pero como en estas hubo demasiada agua, y con tanta fuerza que arrastró mucha basura y árboles al mar, que este aún no la ha logrado sacar, por lo que los pescadores si tiramos las redes lo único que conseguimos es arruinarlas por los árboles y basura que se enredan en ellas”, explicó Mario Gamero, miembro de la Asociación Cooperativa de Pescadores del Majahual (Acoopesma).
“Los ríos y quebradas se desbordaron, se pasaron llevando basura, árboles y casas y esto no se ha moderado, entonces el pez cuando percibe ese montón de desechos sólidos mejor se amara, se aleja”, añade el pescador.
Las tormentas llegaron en el peor momento, ya que los pescadores y ostreros tenían tres meses con muy pocos ingresos debido a la cuarentena impuesta por la pandemia COVID-19 y aunque ya se esté abriendo la economía, aseguran que será quizá hasta mediados de julio que ellos puedan ir a pescar y empezar a obtener ingresos.
Toda esta situación les genera una gran incertidumbre, ya que no saben cómo lograrán levantarse de esta crisis y pagar los recibos de servicios básicos y las deudas que tienen con bancos o cajas de crédito.
La mayoría tiene préstamos que han adquirido para comprar equipos de pesca o renovar los que ya tenían, explicó Jorge Alvarado de la Junta de Vigilancia de la Cooperativa de Ostreros del Majahual.
“Aquí todos los pescadores de la zona, estén o no en cooperativa, están atrasados con sus deudas bancarias. Ahorita nosotros nos sentimos ahogados”, contó Alvarado con poca esperanza.
“Yo tengo retrasados $92 por mes desde mayo, posiblemente nos vamos a morir, pero tal vez viene alguna solución, pero lo que yo veo que para pobres como nosotros no vemos alternativa. Ojalá el Estado nos tomara en cuenta, al pescador no le dan soluciones, no proponen iniciativas”, añadió.