Es de mes y fecha de pago para miles de asalariados. Sin embargo, la mayoría ya tiene comprometidos sus ingresos y poco hacen para ahorrar un poco. Aunque la situación económica es difícil y cada vez hay que reducir costos, los expertos recomiendan generar un hábito que, por muy pequeño que sea, le genere una reserva para futuras emergencias.
En esta pequeña nota tienes cinco sencillos consejos que pudes aplicar a tu vida diaria para que tu salario no se te acabe a los pocos días de recibirlo.
*Aparta el dinero para tus gastos fijos. Casa, comida, pagos de servicios (luz, agua, internet), gasolina o pasajes para el autobús y alimentación son gastos fijos de los que no puedes prescindir y no deben financiarse con deuda. No elijas comprar ropa nueva o servicios innecesarios si no has apartado el dinero para estos gastos.
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*Reduce los gastos hormiga. Sí, recuérdalo. Los cafecitos, los dulces o las chucherías que te compras todos los días camino al trabajo o por las tardes, al acumularlos, se convierten en varios dólares que pueden significar un ahorro importante si te lo propones.
*Prepara tu comida en casa. Este es un buen hábito que te ahorrará muchos dólares. Si suponemos que un almuerzo fuera de casa cuesta como mínimo $2 y esto lo multiplicas por 24 días laborales, esto representará un gasto de $48.
*Consigue una alcancía y llénala poco a poco. Hace cinco años Iris Chávez, una mujer de 40 años, decidió comprar una alcancía con forma de sandía en el Mercado Central que solo le costó $5. Durante un año decidió agregarle todos los días una moneda de $1 o más cuando podía. Al finalizar el año, rompió la alcancía y se dio cuenta que había ahorrado $556 que sirvieron para pagar la matrícula y los libros de su hijo. Desde ese día no dudó en mantener esa práctica con la que consiguió un ahorro seguro.
*Forma un “cuchubal” con tus compañeros de trabajo. Esta es una práctica muy recurrente entre los empleados de una oficina y puede ayudarte a crear un ahorro extra. Muchos lo hacen entregando desde $5 hasta $20 cada vez que reciben su salario. Busca compañeros de confianza con los que puedas hacerlo para que siempre tengas dinero ahorrado en varias vías y así puedas responder financieramente cuando tengas una emergencia.