Un cazatalentos sedujo a Gracia Rossi y la lleva directo a Microsoft

La salvadoreña ha comprobado que el género no es ninguna barrera para no alcanzar grandes metas y que lo que valen son las ideas.

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“Aquí no es el que más sabe, sino el que más quiere aprender", afirma Gracia Rossi. Foto EDH / Húber Rosales

Por Karen Molina

2019-03-05 7:10:14

Las habilidades gerenciales y su experiencia en la industria tecnológica fueron los principales motivos que llevaron a Microsoft a contratar a Gracia Rossi hace 20 años.

Fue un headhunter (cazatalentos) el que le insistió durante un mes para que aceptara un trabajo en el que no importaba si era hombre o mujer. Lo único que valía era su experiencia y sus conocimientos para desempeñar el cargo en la compañía. Ahora es Gerente general de Microsoft.

“Yo trabajaba para otra multinacional y en esa época siempre se había trabajado a través de socios de negocios. La empresa para la que trabajaba era un socio importante de Microsoft y un día me llamó un headhunter que estaba interesado en mi perfil”. Sin saber qué compañía la requería, Rossi rechazó la oferta en varias ocasiones, pero tras conocer de primera mano que se trataba de Microsoft, no dudó en asumir el reto. Así fue como Gracia se volvió parte de una de las multinacionales de tecnología más importantes del mundo.

Con un carácter jovial, pero a la vez, decidido, Rossi dirige en el país y en la región, todas las operaciones de venta y gestión de alianzas con socios de una de las multinacionales tecnológicas más importantes del mundo.

“Mi background fue arquitectura y después, en el camino, saqué otras carreras. Yo jamás me imaginé que iba a trabajar para una compañía de tecnología. Me implicó esfuerzo, pero también (me ayudó) su dinámica de trabajo. La empresa siempre ha visto el tema de la diversidad y la inclusión. La diversidad de raza, credo, de tu background. Aquí tenemos personal que está programando y son abogados. Este trabajo es muy diverso”, señaló.

Y eso mismo pasa con el tema de género. “Una de las ventajas es que la compañía abre muchas oportunidades. El tema que tiene que ser un hombre o una mujer, en la compañía, no está marcado”, sostiene la ejecutiva.

Foto EDH / Húber Rosales

Ser líder siendo empleada

Pero Rossi también piensa que hay una idea errónea al comprender el liderazgo de una mujer y por esa razón, se cree que hay muy pocas dirigiendo compañías.

“Uno piensa que no hay muchas mujeres ejecutivas y que si una mujer quiere progresar, tiene que ser emprendedora y no puede ser empleada, pero una mujer también puede ser empleada y crecer en liderazgo”, aseguró.

A ella misma, desde la empresa, señala que le da una gran satisfacción lo que hace y que la realiza como mujer y profesional, asumiendo todos los días diferentes desafíos en todo nivel.

“Tengo una gran bendición, que es trabajar para una empresa de tecnología. Los retos son muy diferentes. Es una empresa extremadamente dinámica, pero venir a trabajar para mí es disfrutar lo que hago.

“El día que usted se levante y diga: ‘tengo que ir a trabajar’… ¿sabe qué? ¡Busque otro trabajo!

Uno tiene que amar lo que hace porque cuando vos amas lo que haces, todo lo demás te llega por añadidura. ¿Qué es lo que te apasiona? Si eso te mueve: ¡nice!

Amante de la playa y el surf

Rossi ama el mar. “Viviría ahí”, dice con sus ojos chispeantes de emoción cuando se imagina entre las olas.

Y es que, detrás de esta ejecutiva, también hay una surfista que aprendió este deporte por acompañar a su hija, que fue la primera entusiasta.

Ahora se va todos los fines de semana para la playa, se relaja y recarga energías para su semana laboral. Le gusta correr, pero no realiza maratones, pues afirma que lo hace por puro disfrute.

Es madre de dos hijos adolescentes a los que motiva a cumplir sus sueños, sea cual sea y les replica todas las veces que pueda una de sus frases favoritas: “what you give is what you get” (lo que das es lo que recibes).

“A veces las cosas no llegan en el momento que vos querés. Uno tiene que dar. Hay que entender que lo que das es lo que te regresa”, dice convencida de que quiere replicar esa filosofía en todas las áreas de su vida.

Este año, por ejemplo, Microsoft desarrollará el programa DigiGirlz, que tiene por objetivo empoderar a las niñas adolescentes a involucrarse en diferentes actividades tecnológicas.

A las niñas les dice: “no le tengan miedo a la tecnología”, afirma. Y más allá de que el programa esté enfocado a las niñas, Rossi está promoviendo el estudio de carreras tecnológicas en las que solo se necesita el deseo de seguir aprendiendo.

“Nosotros trabajamos aquí empoderando a la gente a través de la tecnología. A las niñas y a las jovencitas: que no le tengan miedo a la tecnología. Al contrario, las carreras de tecnología son de las que más flexibilidad laboral te dan. Podes trabajar desde donde sea. Además, la diversidad de pensamiento es lo que hace mucho más valiosas a las compañías y lo más importante, el deseo de estar en permanente aprendizaje”, afirma.