Las distribuidoras de energía eléctrica en El Salvador publicaron el nuevo pliego tarifario que deberán pagar los salvadoreños durante el último trimestre del año. Con un aumento de alrededor del 10 %, la energía será más cara en octubre, noviembre y diciembre.
En El Salvador, el precio de la energía es establecido por las empresas generadoras de energía y aprobado por la Superintendencia General de Electricidad y Telecomunicaciones (Siget).
Para este trimestre, la distribuidora CAESS anunció que la tarifa residencial para el primer bloque, el que consume 99 kilovatios hora o menos al mes, es de $0.1698. En el periodo anterior (15 de julio- 14 de octubre) la energía costaba $0.1550; un 9.60 % menos.
En el caso de la empersa Delsur, el kilovatio hora tendrá un precio de $0.1716 para el bloque de 0 a 99kWh/mes. El trimestre pasado fue $0.1555; es decir, un 10.4 % más bajo.
En el periodo pasado, las distribuidoras informaron que el pliego tarifario tendría un aumento promedio de 3.8% para los hogares de consumo entre 0 y 199 kilovatios por hora y hasta un 4% más para los hogares con un consumo de 200 kilovatios al mes.
El subsidio al servicio de energía eléctrica siempre se aplica a aquellas familias que consumen hasta 99 kilovatios hora al mes.
Tarifa de la energía eléctrica aumentará hasta un 4% a partir de este mes
El precio
En el país, el precio de la energía se define a través de varios factores como el costo de producción, según la fuente (hídrica, térmica, solar, biomasa, etc.) y de qué tanto sea la importación de energía.
La titular de Siget, Blanca Coto, confirmó que, por ejemplo, el país se ha ahorrado $512.63 millones entre 2014 y junio 2018 por comprar energía a través del Mercado Eléctrico Regional (MER).
La mayoría de la energía que compra El Salvador proviene de Guatemala y llega a través del Sistema de Interconexión Eléctrica de los Países de América Central (SIEPAC).
Para cuidar el nivel de consumo y generar ahorros en las facturas, las autoridades siempre recomiendan a la población sustituir los focos y lámparas tradicionales por luminarias ahorradoras de energía (facilitan hasta un 25 % de ahorros), evitar que dispositivos estén encendidos mientras no se utilizan y revisar las instalaciones eléctricas para detectar posibles daños.