Remesas permitieron crecer a economía en segundo trimestre

La unión aduanera con Honduras y Guatemala, el crecimiento de los principales socios comerciales del país y el establecimiento de nuevas relaciones diplomáticas son, según el Banco Central de Reserva (BCR), los factores que permitirán crecer al 2.6 % en 2019.

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El crecimiento en el consumo privado fue impulsado por indicadores como el de los ingresos de remesas familiares, que a agosto sumaban más de $3,600 millones. Foto EDH / archivo

Por Vanessa Linares

2018-09-28 8:13:40

Entre abril y junio 2018, la economía salvadoreña experimentó un crecimiento mayor que la del primer trimestre del año pasado, indicó este viernes el Banco Central de Reserva (BCR).

El Banco destaca que este crecimiento se debe a la expansión del consumo de los hogares, mayormente impulsado por el crecimiento de los ingresos de las familias producto de las remesas. Según los datos oficiales, hasta agosto, el país recibió más de $3,600 millones en este concepto.

Aunque la dinámica productiva registrada en el segundo trimestre 2018 creció 2.5 %, la tasa es menor a la reportada en el primer periodo del año, cuando el Banco estimó un 3.4 %. No obstante, el promedio entre enero y junio 2018 sumó 2.8 %; más que el del primer semestre de 2017, cuando al crecer 1% entre abril y junio, apenas alcanzó el 1.9 %.

Pero, ¿a qué se debe el crecimiento? Según los datos oficiales, a que esta vez, todas las actividades económicas experimentaron variaciones positivas.

Las que más crecieron, comparadas al mismo periodo de 2017, fueron las de Minas y canteras (9.1 %); Actividades profesionales, científicas y técnicas (7.6 %); las de Servicios administrativos y de apoyo (4.8 %) y las de Salud y asistencia social (4.4 %).

Por otro lado, los préstamos otorgados a las empresas también crecieron 7.9 %; las importaciones de bienes de capital 2.9 %; la inversión pública tuvo una expansión del 27.8 % y el consumo público también creció 9.1 %.

El economista de la Fundación Nacional para el Desarrollo (Funde), Carlos Pérez, estimó que como la actividad económica está levemente más dinámica que el año pasado, es posible prever un crecimiento de entre 2.4 % y 2.5 %, unas décimas mayor que el del año pasado.

“Este dinamismo se debe a un mejor desempeño del sector construcción, que está creciendo arriba del 6%; así como la industria y el comercio, que crecen 2.8% y 3.4% respectivamente. Estos dos últimos, al ser los sectores de mayor peso en el PIB, marcarán la pauta del crecimiento agregado y con su buen desempeño atenuarán el bajo aporte de la agricultura, sector que se ha visto golpeado por la sequía de mediados de año”, explicó Pérez.

Los datos del BCR también destacaron que el aumento de las remesas familiares y el superávit de la producción de servicios fueron los que compensaron, al menos ne parte, el desequilibrio en el comercio de bienes.

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Menor flujo de inversión

Pero no todas fueron buenas noticias. El BCR también informó ayer que, por otro lado, los flujos de inversión extranjera directa experimentaron una considerable reducción entre el segundo trimestre de 2017 y el de 2018 al pasar de $406.2 millones a $287.4 millones, respectivamente.

Según el presidente de la institución, Óscar Cabrera, esta baja en los flujos netos se debe a la repatriación de beneficios de las empresas a sus casas matrices.

Asimismo, los sectores industria ($272.3 millones), comercio ($47.5 millones), actividades financieras y seguros ($8.4 millones) y construcción ($1.7 millones) fueron los que concentraron los aumentos en los flujos de inversión; otros como el de electricidad (-$16.2 millones), información y comunicaciones (-$14.6 millones) y el resto de áreas que incluye al sector agropecuario, minería, transporte y otros servicios (-$11.8) fueron los que reportaron disminuciones.

Perspectivas para 2019

La unión aduanera del Triángulo Norte de Centroamérica, el crecimiento de los principales socios comerciales del país y las nuevas relaciones diplomáticas con China Popular son, según el BCR, los factores que sustentarán el crecimiento de 2.6 % previsto para la economía salvadoreña en 2019.

De acuerdo con su último informe del comportamiento económico, estos proyectos son los que permiten actualizar la perspectiva para el próximo año en dos décimas, de 2.4 % a 2.6 %.

Pérez fue más cauto y estimó crecimiento entre 2.3 % y 2.5 %, considerando que el próximo año el crecimiento “se verá impactado por el clima electoral, más si se llega a una segunda vuelta, esto porque todo el primer trimestre se tendrá proselitismo y se mantendrá la incertidumbre respecto del futuro del país”.

Cabrera, destacó que las proyecciones del banco son cercanas a las hechas por organismos internacionales como el Banco Mundial, el Fondo Monetario y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y se respaldan con que, al menos por implementar la Unión Aduanera, los tres países de Centroamérica se convertirán en la octava economía más grande de Latinoamérica.

Por otro lado, los beneficios de las relaciones con China, dijo Cabrera, estarán distribuidos en diferentes canales como más inversión extranjera, transferencia tecnológica, flujo comercial y en la integración de los sistemas financieros.

Al respecto, Pérez explicó que “El Salvador no tiene conexión alguna con la economía China”, por lo que establecer relaciones diplomáticas entre ambos países no le dará un impulso la actividad productiva salvadoreña.

“Las exportaciones a China en 2018 serán de un máximo de $100 millones, siendo el principal ítem, el azúcar; que de hecho los envíos a China coinciden con una disminución de las ventas a Taiwán, por lo que lo que hay es una sustitución de comercio”, apuntó el economista.