Para adherirse a la Unión Aduanera el país debe desmontar trabas al comercio

El Salvador tiene que invertir en infraestructura fronteriza y nuevo sistema informático.

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El Salvador deberé ampliar y renovar sus puestos fronterizos para lograr implementar completamente el proceso de la Unión Aduanera, además tendrá que capacitar al personal de aduanas. Foto EDH / archivo

Por Jessica Guzmán

2018-06-22 7:16:49

Para que El Salvador se adhiera al proceso de Unión Aduanera, que ya poseen Guatemala y Honduras, con el cual pretende agilizar el comercio intrarregional y dejar atrás los eternos dolores de cabeza de los cuales se quejan los empresarios, nuestro país debe invertir en la ampliación de los puestos fronterizos y en un nuevo sistema informático, que no se esté cayendo como sucede actualmente.

Tanto los exportadores como los importadores se vienen quejando desde hace rato que en El Salvador siempre hay problemas con el sistema de aduanas por la falta de personal, las arbitrariedades de los agentes aduanales, porque se cae el sistema en línea, se hacen largas colas y se atrasan las mercancías, entre otra serie de situaciones; por lo cual al unirse El Salvador a la Unión Aduanera se tiene la esperanza de que se daría una solución a esta problemática.

Recientemente se dio a conocer que el protocolo de Adhesión a la Unión Aduanera está en manos de la Asamblea Legislativa, y los diputados están de acuerdo en que se concrete esta integración en beneficio del comercio de El Salvador y regional; sin embargo, el reto real está en la implementación del proceso mismo.

Por ejemplo, el sistema informático que utiliza la Dirección General de Aduanas y, por tanto, el que utilizan exportadores e importadores no responde a las necesidades comerciales, al contrario las dificulta, ya que continuamente se cae y atrasa los negocios.

Anteriormente el subdirector de la dirección de Aduanas, Abilio Vadillo, reconoció que el sistema informático del Ministerio de Hacienda debe ser renovado, ya que no responde a la demanda que exige esa cartera de Estado y sus siete direcciones, y dos de ellas: la de Impuestos Internos y la General de Aduanas, están directamente vinculadas a la Unión Aduanera.

Renovar el sistema informático requerirá una inversión de más de $5 millones, además de la capacitación del personal, informó en esa oportunidad Vadillo.

Por el lado de la infraestructura, se tendrán que renovar y ampliar los puestos fronterizos, ya que tendrán que habilitarse los de libre circulación, que correspondan a la Unión Aduanera, y los de registro interno.

Para la presidenta de la Comisión Intergremial para la Facilitación del Comercio, CIFACIL, Carmen Aída de Meardi, este proceso es el que les llevará más tiempo.

“Se tendrá que habilitar la interconexión (informática) entre los países y los planes de contingencia ante las caídas de los mismos. Además las adecuaciones en la infraestructura física de los puestos fronterizos, seguridad fronteriza coordinada, y para la disponibilidad de recursos financieros debe aportarse un Fondo Estructural de $5 millones”, dijo de Meardi.

Dichos fondos están registrados en el protocolo de adhesión y servirán para el Fondo Estructural y de Inversiones que fue creado por Guatemala y Honduras, según lo establecido en el Protocolo Habilitante, es decir en el documento que da vida a la Unión Aduanera. El dinero servirá inicialmente para las obras de infraestructura.

Con la Adhesión de El Salvador a la Unión Aduanera con Guatemala y Honduras se prevé mayor agilidad en los pasos fronterizos. Foto EDH / archivo

Habrá libre circulación

Según la presidenta de Cifacil, con la Unión Aduanera habrá libre circulación dentro del territorio único aduanero, para un listado de productos negociados, los cuales tendrán medidas de facilitación de comercio a través de la creación de puestos fronterizos integrados e intervenciones conjuntas.

Para esto se deberá elaborar un documento legal uniforme que constituye factura y declaración, que respalda operaciones de transferencia y adquisiciones de bienes (FYDUCA) , con lo que se espera un proceso documental ágil y eficiente. Además, dijo de Meardi, se promoverá la integración de cadenas productivas y procesos de co-producción entre los tes países. También se espera un menor tiempo en aspectos logísticos y una reducción de los costos por furgón.

Incluye la libre movilidad de personas (en Migración) y facilidades en los aeropuertos de los tres países, al considerarse vuelos locales.

Hablar de los tres países es en cifras de acuerdo con datos de SIECA, se refiera a un Producto Interno Bruto (PIB) de $126.933 millones (el 47.7% del comercio de Centroamérica), un territorio de 242,020 Kms.2 (el 48.5 % de C.A.) y una población de 32.1 millones de habitantes ( el 68% de la población regional).

Entre los tres países hay una movilidad comercial intrarregional de $6,208.2 millones (el 69% de C.A.).

Habrá excepciones

Cifacil informó que al mismo tiempo se definirá una lista de las excepciones al régimen de libre circulación, es decir, que ciertos productos seguirán funcionando con los puestos fronterizos vigentes.

Entre estos se mencionan el azúcar y el café; productos que tienen arancel desarmonizado en Centroamérica; productos que tienen diferencias arancelarias o de reglas de origen en los acuerdos comerciales, así como los productos que tienen un régimen fito o zoosanitario diferenciado. Asimismo, tendrán excepciones los productos sujetos a contingentes arancelarios y los que tienen regímenes fiscales diferentes, dijo.

Un paso con cautela

Una de las recomendaciones de gremiales como Cifacil y de la Cámara de Comercio e Industria de El Salvador (Camarasal) es que esta adhesión se trabaje con cautela, ya que El Salvador está tratando de entrar tarde, cuando Guatemala y Honduras ya están avanzados.

Javier Steiner, presidente de la Camarasal, dijo que es importante que El Salvador se adhiera a la Unión Aduanera, pero recalcó que internamente el país tiene “la tarea pendiente” con la agilización comercial, ya que en las aduanas se dan muchos atrasos.

Para de Meardi, una vez que la Asamblea ratifique la Unión Aduanera, el sector productivo deberá implementar un nuevo facturaje para la mercancía que entre, lo que llevará un tiempo de prueba. “El sector productivo requerirá de al menos tres meses para hacer pruebas pilotos, y los ajustes en nuestra contabilidad, porque ya no serán (en esa mercancía) exportaciones e importaciones, sino transferencias y adquisiciones”, concluyó.