Un médico neumólogo ingresó el miércoles por la noche a cárcel de Mujeres para verificar la salud de Violeta Menjívar quien de acuerdo a familiares ha presentado complicaciones de salud en el recinto donde fue llevada a finales de julio luego de que se decretara la detención provisional para ella y otros cuatro exfuncionarios del FMLN.
Según el Comité de Familiares de Presas y Presos Políticos de El Salvador (COFAPPES), el especialista pudo ingresar al penal en horas de la noche luego de que el Juez Segundo de Paz de San Salvador ordenara la visita.
"Estamos a la espera del informe médico", dijo a este medio una familiar de la exministra de Salud quien añade que las primeras apreciaciones del médico fue que si bien ella se encuentra "fuerte de espíritu" le preocupa el estado de sus pulmones.
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La fuente añadió que esta es la segunda vez que el médico, quien ha atendido a Violeta Menjívar por años, entra al centro de reclusión. La primera vez fue el 3 de agosto. "En esa fecha encontró un bronco espasmo e indicó tratamiento el cual ha seguido hasta ahora", explica.
Además del medicamento, la detenida ha necesitado un medidor de flujo respiratorio, dispositivo que le permite monitorear la capacidad de sus pulmones para expulsar aire.
COFAPPES dijo además que este jueves se está nuevamente a la espera de que personal de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos puedan ingresar al centro penal de Ilopango y a Mariona.
El 10 de agosto el juez ordenó se permita la entrada de la PDDH para verificar el estado de salud tanto de Menjívar como de Erlinda Handal y Carlos Cáceres, exministro de Hacienda.
En horas de la mañana de hoy personal de la PDDH se encontraba afuera del penal de Ilopango, al ser consultados si encontraban en el lugar por el caso de los exfuncionarios señalaron que su visita era por observación rutinaria.
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Desde hace varios días los familiares de los cinco detenidos por delitos de lavado de dinero e enriquecimiento ilícito durante la administración de Mauricio Funes (2009-2014), han denunciado que Centros Penales ha violado los derechos constitucionales de los detenidos y los mantiene incomunicados.
Según las denuncias les han violentado el derecho al principio de inocencia, a la libertad personal y ambulatoria, al honor, a la integridad personal y a la garantía del debido proceso, incluso señalaron que no habían podido ver ni a sus abogados y que como familiares desconocían sobre el estado de salud y condiciones en la que se encuentran.