“La violencia no es como algo que se da espontáneamente, hay una violencia estructural, producto de todo lo que significa una visión patriarcal de las relaciones humanas entre hombres y mujeres donde hay más privilegios hacia los hombres. A las mujeres nos cosifica y desde esa perspectiva se cree que las mujeres podemos ser sujetas de violencia”, dijo Silvia Quiroa, directora ejecutiva del CESTA, en el Festival por la no violencia hacia la mujer que se llevó a cabo el jueves en el marco de la celebración del Día Internacional y Nacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.
Quiroa aseguró que en El Salvador aún falta entender que la violencia no es normal ni natural y que se debe de trabajar para cambiar esta perspectiva social que persiste y para ello es necesario involucrar tanto a las mujeres como a los hombres porque el cambio debe de ser estructural.
La profesional considera que por los esquemas sociales de patriarcado que rigen la sociedad salvadoreña ha llevado al país a estar entre las naciones que tienen los más altos índices de feminicidios en la la región.
“El Salvador es uno de los países que tiene más niveles de feminicidios en la región y creemos que tenemos que tenemos leyes para combatir esa violencia, que es básicamente cuando hay feminicidios, pero también hay otras violencias que son difíciles de combatir a nivel legal, tienen que generarse políticas públicas”, expresó.
Feminicidios
De acuerdo con a la Red Feminista Frente a la Violencia Contra las Mujeres, entre enero y lo que va de noviembre de este año se han registrado 88 feminicidios. Además, según datos de la Fiscalía General de la República (FGR), entre enero y el 15 de junio de 2020 se contabilizaron 2,514 denuncias de hechos de violencia sexual.
Además de 550 denuncias de hechos de violencia intrafamiliar y 1,993 denuncias por expresiones de violencia.
Según los datos de la Dirección de Información y Análisis (DIA) del Ministerio de Justicia y Seguridad Pública, hasta agosto se tenían 84 feminicidios, es decir en los últimos tres meses han ocurrido cuatro más.
“Si bien es cierto que los feminicidios han bajado en comparación con 2019, estos aumentaron durante la cuarentena; de la cifra total de estos crímenes reportados en ocho meses de 2020, 56 se cometieron en el período de abrir a agosto. De tal forma que el 67% ocurrió durante la cuarentena domiciliar por la Pandemia del Covid-19, cuando hubo mayor convivencia de las mujeres con sus agresores”, se lee en la página del Observatorio de Ormusa.
Los datos revelados por la organización muestran que la mayor cantidad de feminicidios ocurrió en abril con 15 y agosto con 16, mientras que en junio se contaron cuatro.
Según los datos proporcionados por la DIA, en este año las mujeres víctimas de feminicidios han sido menores de 29 años, específicamente el 44 % , pero no todas son mayores, entre las víctimas está dos niñas menores de 4 años y una adolescente dentro del grupo de edad de 10 a 14 años.
Violencia durante el confinamiento
Este miércoles miles de salvadoreñas salieron a las calles a denunciar los actos de violencia a las que son sometidas las mujeres, las organizaciones hicieron especial énfasis en el aumento de vulneraciones de derechos de las mujeres durante la pandemia causada por el COVID-19, especialmente en los meses más críticos.
Según datos de colectivos de feministas, en abril y mayo pasado se registraron 15 y 10 feminicidios. Estos meses fueron los más estrictos en el país en cuanto a las medidas de restricción de movilidad y acceso a diferentes servicios, entre estos de salud.
Las Red de Mujeres por la Igualdad y una Vida Libre de Violencia señaló en un comunicado que la actual coyuntura de emergencia “ha desmejorado la calidad de vida de las mujeres, aumentado los casos de violencia, feminicidios y violencia institucional”.
Por su parte, otras organizaciones indicaron que un buen número de salvadoreñas “tuvieron que sobrevivir ante el confinamiento por la pandemia, ya que en muchos casos su agresores o agresores viven con ellas o están cercanos a ellas”.
Más del 40 % de las mujeres en El Salvador sufrió algún tipo de violencia machista durante el confinamiento por la pandemia del COVID-19, de acuerdo con un estudio de la organización feminista la Colectiva Amorales.
Según la Cepal, la situación de las mujeres se ha visto “agravada” durante el confinamiento por la pandemia de la covid-19, ya que el aislamiento “limitó el acceso a redes de apoyo y servicios de atención” destinados a evitar la violencia machista.
“De acuerdo al monitoreo de medios de comunicación que realiza ORMUSA, de enero a septiembre de 2020, hubo 15 feminicidios de pareja, cuatro más de los 11 que se cometieron en los 12 meses de 2019, según el seguimiento noticioso”, consigna el sitio web.
El Salvador es considerado por Amnistía Internacional (AI) uno de los países más peligrosos del mundo para las mujeres.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) señaló este miércoles que los países con mayores tasas de feminicidios por cada 100,000 mujeres son Honduras (6.2), El Salvador (3.3), República Dominicana (2.7) y Bolivia (2.1).
En este contexto, la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (Fespad) exigió el fortalecimiento de la institucionalidad del Estado que tutele de manera efectiva los derechos de las mujeres, para ello, según la ONG, se debe de garantizar el desarrollo de políticas públicas que promuevan de forma inicial la prevención y permitan la atención y sanción de los casos de violencia contra las mujeres, niñas y adolescentes.
“El Estado salvadoreño debe generar las condiciones óptimas para que disminuyan todas las formas de violencia hacia las mujeres, las brechas de desigualdad de género y la asimetría del poder existente de los hombres frente a las mujeres”, manifestó Fespad.
