El Sistema de Emergencias 911 recibió la alerta de un tiroteo en la Zona Rosa, de la colonia San Benito, en San Salvador, ocurrido durante la madrugada de este domingo. Según el reporte policial, un hombre en estado de ebriedad que había llegado armado a las cercanías del local empezó a discutir con un vigilante y luego le disparó.
Ante el ataque, el vigilante también reaccionó y lesionó de bala al sujeto. Durante el tiroteo también resultó herido un cliente de otro bar.
Cuando los agentes de la Policía llegaron al lugar, el sujeto disparó también contra la patrulla e intentó darse a la fuga. El hecho dejó en total como lesionados al vigilante, el atacante y un cliente de un negocio.
Hasta el momento se desconoce la identidad del sujeto que provocó el tiroteo. Los lesionados fueron llevados a un centro asistencial.
Según información no oficial, el vigilante herido es un agente de la Policía que durante sus días libres se ganaba ingresos extra en ese negocio.
El sábado 3 de agosto hubo un repunte de homicidios, a comparación de días anteriores. Las estadísticas de fuentes policiales concretaban que solo el sábado, hasta las 8:40 de la noche, diez personas habían sido asesinadas: 1 en Santa Ana, 1 en La Libertad, 2 en San Vicente, 3 en La Paz, 1 en San Miguel, 1 en Sonsonate y 1 en San Salvador.
La Fiscalía General de la República confirmó el sábado por la tarde diez de las muertes sucedidas entre el 2 y el 3 de agosto. Ese recuento no incluye las tres muertes ocurridas el 1 de agosto en igual número de balaceras: dos en Sensuntepeque, Cabañas; y una en Jiquilisco, Usulután.
Las personas que murieron en esos hechos se habrían enfrentado a tiros con la Policía en esos dos lugares, y de ahí, que el gobierno los excluye de la lista de homicidios.
Entre las muertes del sábado, las autoridades reportaban la de dos mujeres: una en Santa Ana y otra en Mejicanos (San Salvador).