La tarde del sábado Spiderman camina por la concurrida calle principal de la colonia Las Colinas, en Ciudad Delgado, ante el asombro y la curiosidad de los niños y niñas que encuentra a su paso, mujeres y hombres los saludan, algunos se toman una selfie con él.
Bajo el traje del famoso superhéroe de Marvel está Luis Alberto Mejía Mangandi, un joven que ante la necesidad después de quedar desempleado encontró una forma creativa e innovadora para ofrecer deliciosas minutas poco tradicionales que incluyen mezclas de ingredientes dulces, salados ácidos y hasta picantes.
Ese sábado junto a unos 20 emprendedores locales, vestido de Spiderman, Alberto ofreció sus minutas en el festival realizado en la colonia y organizado por los mismos residentes, con el fin de ofrecer a sus vecinos una variedad de productos y bocadillos.
Spiderman y sus sabores fuera de la común
Mangandi relata que Spiderman es su personaje favorito y decidió disfrazarse de él para llamar la atención al momento de vender las minutas en su emprendimiento bajo el nombre de “La Raspada”.
Por supuesto, se las ingenió para crear especialidades relacionadas al cómic es así como entre las minutas que ofrece están la Venom, Duende Verde, Spiderman y la TNT, esta última una mezcla de ingredientes ácidos y picantes, solo para paladares de valientes.
Para los amantes de lo dulce están los sabores tradiciones pero con un toque original, por ejemplo, la “Esponjosa” una mezcla de piña colada, marshmallow y galletas.
Y para los que prefieren las frutas esta la “Fructífica” una combinación de manzana con guineo y diferentes jaleas.
“Las mezclas han ido mejorando a petición de los clientes, ellos fusionan los sabores y me ayudan a innovar mi emprendimiento” dice con orgullo el joven.
El Spiderman de Ciudad Delgado explica que nada de esto sería posible sin la ayuda de su madre, Eva Mangandi, pues fue ella la que le animó a crear su propio emprendimiento.
“Las minutas son como una herencia por parte de la familia de mi padre porque mi abuelo tiene su carretón de minutas, pero mi mamá fue la que me animó a perder el miedo y comenzar mi negocio” relata Alberto.
Tras compartir en redes sociales fotos, videos e historias con el traje de Spiderman, la gente comenzó a preguntarle si lo podían contratar para eventos y fiestas.
Mangandi vio una nueva oportunidad para expandir su negocio y ahora ofrece paquetes para amenizar cumpleaños, fiestas infantiles o eventos empresariales.
“El primer cumpleaños que animé fue de una niña y la temática era de princesas, pero las niñas se emocionaron al ver a Spiderman haciendo los juegos y las dinámicas” dice.
El último esfuerzo de este joven entusiasta es la organización de la feria de emprendedores en su colonia con el fin de ayudar a comerciantes que solo venden desde casa.
“Nos hemos unidos todos los emprendedores para que los vecinos nos conozcan y sepan que pueden comparar aquí” explica.
Alberto ahora ya tiene un empleo fijo, pero por las noches y fines de semana atiende su emprendimiento creativo e innovador, pero aún tiene sueños de seguirlo mejorando.
