El asesinato de Keyla Yesenia Villeda Castillo, de 34 años, ha causado conmoción e indignación, después que el ataque que acabó con su vida quedara captado en un video de una cámara de seguridad..
Keyla Yesenia tenía por costumbre salir de su trabajo a las 12 del mediodía, conducir su motocicleta por las calles del municipio de Chiquimula hasta su casa, con el fin de almorzar con su hijo de 9 años.
La joven era madre soltera y trabajaba como secretaria en un hospital privado cerca de la alcaldía municipal de esa localidad guatemalteca.
El martes cuando la joven salió con la intención de montar su motocicleta, un hombre vestido de negro, con arma en mano la atacó sin mediar palabras.
VIDEO: Cámara capta cuando sicarios dan persecución y matan a mujer en Guatemala
La mujer intentó huir, corrió, pero al primer disparo cayó sobre la acera, el asesino aprovechó para asestarle al menos tres balazos en la cabeza. Todo quedó registrado en un video grabado por una cámara de seguridad instalada en la zona.
Las imágenes demuestran el momento exacto en que un hombre armado, persigue y le dispara a la mujer, identificada como Keyla Villeda. Video: imágenes de carácter ilustrativo y no comercial https://twitter.com/i/status/1478536921232158720
La joven aún con vida fue traslada por Bomberos Voluntarios a un centro asistencial, donde murió en horas de la madrugada del siguiente día.
Luto
Keyla Yesenia era muy admirada por su belleza física y su carisma, es por eso que una de las sospechas de su familia es que una persona haya pagado a un sicario para asesinarla, simplemente por envidia, según detalla una nota periodística de TN23.
"A ella mucho "baboso" (hombre) la enamoraba y nosotros sospechamos que la mujer de un "baboso" le pagó a alguien para que la mataran, pero solo Dios sabrá que pasó" dijo el padre durante la entrevista realizada por ese medio guatemalteco.
Según vecinos y familiares la joven habría recibido amenazas de la novia de su exnovio, con quien hace un año había finalizado una relación sentimental. Sin embargo, ella no denunció las amenazas ante las autoridades.
Keyla aunque trabajaba como secretaria en un centro médico, hace tres años había logrado graduarse de maestra.
