Son 14 centros escolares ubicados cerca del área de impacto por la construcción del Periférico Gerardo Barrios, en el departamento de San Miguel, los que obtendrán algunos proyectos para el desarrollo de la comunidad estudiantil como parte del fondo de compensación ambiental que desarrolla el Fondo Ambiental de El Salvador (FONAES).
Los 14 centros educativos contarán con el programa de Guardianes Ambientales, 25 niños por cada centro escolar, dirigido para estudiantes de 4º grado (el primer año de ejecución), luego 5º grado (el segundo año) y 6º grado (el tercero año).
La meta es que estos niños, que habrán recibido un seguimiento por tres años, serán quienes repliquen lo aprendido con el resto de la población estudiantil.
También cada escuela implementará un huerto escolar equipado con sistema de riego y sistema de captación de agua lluvia, además de una campaña de reforestación y manejo de desechos sólidos.
En el caso del municipio de San Miguel, el proyecto contempla una planta de trasferencia de basura para las escuelas
involucradas. Y en algunos centros educativos hay proyectos de infraestructura.
Los 14 centros escolares están distribuidos de la siguiente forma: seis en el municipio de San Miguel, cinco en Quelepa y tres en Moncagua.
En el Centro Escolar cantón el Obrajuelo en el municipio de Quelepa, San Miguel, a finales del mes pasado iniciaron con la construcción de los servicios sanitarios lavables para el área de parvularia, que contarán con fosa séptica y su pozo de recepción de líquidos.
“Hace dos años los estamos solicitando al señor alcalde; ya iniciaron, los señores están trabajando”, comentó Sandra Medrano, directora del centro educativo, quien agregó que en el centro escolar son muchas las necesidades, “pero como ahora los proyectos vienen de Presidencia, lo que más se necesite, hemos priorizado los servicios, porque ya no reunían las condiciones necesarias para los niños”, señaló.
En el Centro Escolar cantón San Antonio tienen planificado el engramado de la cancha y arborizar. Otros centros educativos son Centro Escolar Ana Rita Veliz de Moreira, Centro Escolar cantón San José, y una quinta escuela que aún no ha sido elegida, según confirmó el alcalde de Quelepa, Noel Argueta.
En el municipio de Moncagua, las escuelas involucradas son: los Centros Escolares cantón Valle Alegra I y II y cantón el Papalón, dijo Luis Carrillo, encargado de la unidad medioambiental de la municipalidad.
En una de estas escuelas se intervendrán los servicios sanitarios, y ya iniciaron con el programa de Guardianes Ambientales. Aún están a la espera de los otros componentes antes mencionados.
Los proyectos a desarrollar en los diferentes centros escolares debían iniciar en mayo, comentó el alcalde de Quelepa, “pero debido a varios factores (no se pudo)”, apuntó.
Beneficios comunales
En el municipio de San Miguel los centros educativos beneficiados son: Centro Escolar La Pradera, Centro Escolar Gerber de Sola, Centro Escolar La Confianza, Complejo Educativo Católico Espíritu Santo en cantón El Jalacatal, Centro Escolar cantón Hato Nuevo y Centro Escolar cantón El Papalón.
Los proyectos que serán financiados con el Fondo de Compensación Ambiental y una contrapartida de las municipalidades implican la reforestación de áreas verdes de los tres municipios, cercanas al área de impacto o construcción; desarrollar las 14 escuelas sustentables como medidas de adaptación al cambio climático; y 12 parcelas de producción de plátanos, mango panades y cítricos para el municipio de San Miguel.
Así como 28 sistemas silvopastoriles, que incluiran: construcción de reservorio, siembra y fertilización de zacate de pasto y arbusto forrajero (5 en Moncagua, 8 en Quelepa y 15 en San Miguel); así como mejoramiento escénico o siembra de árboles ornamentales en seis kilómetros del periférico ubicados en el municipio de San Miguel. Estos últimos contaran con el apoyo de Oikos Solidaridad para los tres municipios.
“Con el mejoramiento escénico, serán 6 kilómetros a cada lado, es decir 12 kilómetros en total. El inconveniente que tenemos es que no hay espacios para realizar este tipo de reforestación en lo que ya está construido, por ello lo vamos a dejar posterior a los años siguientes para esperar el desarrollo de la carretera, dentro de los 3 años del proyecto” explicó Daniel Alas, coordinador de Oikos Solidaridad.
En Moncagua, la municipalidad no ha logrado el involucramiento de la población para hacer efectivo el desarrollo de los tres sistemas silvopastoriles que les han sido asignados, comento Carrillo. El beneficiario debe de contar con 3 a 12 cabezas de ganado y comprometerse con el cuido del sistema.
En el desarrollo de los proyectos que forman parte de la compensación ambiental para San Miguel juegan un papel fundamental las comunidades y las tres municipalidades involucradas, ya que el establecimiento de los sistemas silvopastoriles y las parcelas de producción conllevan un compromiso por parte de los propietarios del terreno y de ser necesario una especie de contrapartida con relación a las mejoras de los terrenos.
La mañana del jueves 26 de agosto, representantes de 12 comunidades del municipio de San Miguel se reunieron con el representante de Fonaes y OIKOS Solidaridad para conocer de cerca sobre el funcionamiento de las parcelas de producción. Una vez los propietarios firmen una carta compromiso, los técnicos a cargo realizaran un estudio de suelo para determinar si contiene los elementos necesarios para la reproducción del cultivo destinado.
“Vamos a tener la oportunidad de contar con reservorios y sistema de riego para sembrar plátano enano, mano panades y limón pérsico e indio, seremos beneficiados y podremos ayudar a las demás personas dentro de la comunidad” comento Sebastiana Guzmán, residente en caserío La Loma, cantón El Jalacatal, San Miguel que contara con una parcela de producción.
Los terrenos deben de estar cercanos al área del periférico Gerardo Barrios, tener acceso a agua y realizarles el análisis de suelo, los propietarios tendrán que comprometerse a cuidar y desarrollar los cultivos, así como los arboles ornamentales para el mejoramiento escénico o las áreas silvopastoriles si deciden participar en cualquiera de estos elementos.