Cristóbal Perla y Perla Fuentes es un médico salvadoreño residente en Cataluña, España, que ha destacado y puesto al país en alto con su gran experiencia en el campo de la neurocirugía.
El compatriota, quien el próximo 11 de marzo cumplirá 40 años, dirige desde el 2020 el Servicio de Neurocirugía en el Hospital HM Nou Delfos, un centro médico privado de gran prestigio.
La neurocirugía se aplica para el tratamiento de tumores cerebrales, aneurismas cerebrales, problemas de columna, trastornos del movimiento como Parkinson, epilepsia refractaria, tratamientos contra el dolor.
El doctor Perla y Perla Fuentes es especialista en neurooncología y cirugía de columna con procedimientos mínimamente invasivos. En el hospital HM Nou Delfos dirige a otros seis neurocirujanos, además trabajan junto a otro personal sanitario multidisciplinario (radiólogos, neuroradiólogos) con quienes también tratan a pacientes que requieren intervenciones de neurocirugía vascular.
El servicio que dirige precisamente da soporte a la Unidad de Trastornos del Movimiento y Cirugía de epilepsia.
“Somos una especialidad que para poder tener buenos resultados tenemos que ir de la mano de otros especialistas, en coordinación y colaboración”, sostiene.
En este contexto practican endoscopio de columna y endoscopio cerebral, intentando causar el menor daño posible y los mejores beneficios para el paciente, según describe.
“Estamos muy actualizados en general, tanto en tecnología como en las últimas técnicas”, afirma el doctor Perla y Perla Fuentes, quien es miembro de la Asociación Europea de Sociedades de Neurocirugía y miembro adherido de la Sociedad Española de Neurocirugía.
Según lo que cuenta su trabajo es duro, demanda muchas horas, mucho esfuerzo y mantenerse actualizado, pero él califica su experiencia en España como “muy buena”, porque según detalla le han acogido muy bien y con la experiencia laboral acumulada en diversos hospitales del sistema público y privado donde ha trabajado su prestigio ha ido en aumento.
¿Qué es lo que más le apasiona de la neurocirugía? “Ayudar al paciente, lograr cirugías poco agresivas y si puedo curar al paciente o generarle un beneficio”, dice sin dudar.
Con trece años de experiencia como neurólogo las situaciones que más le han marcado están relacionadas con pacientes que ha atendido por lesiones en la médula espinal que pueden generar secuelas muy graves y devastadoras, que causan alteraciones de movimiento o problemas muy incapacitantes: “haber visto unos casos así te marca mucho, por lo cual siempre me he esforzado mucho tanto por aprender y poder realizar técnicas poco agresivas y seguras para el paciente”.
El doctor Perla y Perla Fuentes, quien estudió educación básica y bachillerato en el Colegio San Francisco, tiene mucha formación en cirugía guiada por imágenes o neuronavegación (que es como una especie de GPS) tanto para la columna como para el cerebro.
Este joven galeno, apasionado de la neurocirugía, afirma que desde que entró a estudiar la carrera de Medicina en la Universidad Evangélica de El Salvador ya sabía que quería tomar esa especialidad, siguiendo los pasos de alguien a quien admira mucho: su padre.
“Como mi padre es neurocirujano he seguido sus pasos. Él siempre ha sido una persona que lo he visto esforzarse mucho y cuando estaba pequeño a veces me llevaba no a ver los pacientes, sino que me quedaba en la sala de espera y se acercaban pacientes de él, y me decían cosas muy bonitas de mi padre, que él era muy buena persona, que siempre intentaba hacer lo mejor por los pacientes”, comenta.
Hablar de su padre, el doctor Cristóbal Perla y Perla Urbina, quien ejerce en el sector privado y años atrás fue jefe en el Hospital Nacional Benjamín Bloom, le llena de mucho orgullo. Su madre, Guillermina Fuentes de Perla y Perla, ha sido de igual forma parte de su inspiración, pues según externa es el pilar que los ha mantenido unidos.
El amor por la medicina es una constante en la vida de su familia, de ahí que su hermana Patricia Perla y Perla es una neurofisióloga, que también se especializó en España y ha creado en el país un Centro de Estudios Neurofisiológicos.
Aunque el doctor Cristóbal Perla y Perla Fuentes sostiene que su sueño como neurocirujano ya lo está cumpliendo, reconoce que siempre tiene metas que perseguir: “El principal reto es el mantener los estándares de calidad siempre, constante, desarrollándonos en todas las áreas de la neurocirugía”.
En medio de su demandante agenda, que suele implicar a veces jornadas de 10 a 11 horas, el doctor Cristóbal Perla y Perla siempre tiene un espacio de nostalgia para su natal El Salvador, del que extraña a su familia, las pupusas revueltas y las riguas de Antiguo Cuscatlán. Sin embargo, también expresa que se siente a su gusto en España, en la que ve una suma de diferentes países dado que los sitios son diferentes entre sí: “La gente de Cataluña es bastante diferente a la del país Vasco y a los andaluces”.
Afirma que, si bien anteriormente salía a correr, actualmente debido a la demanda de su trabajo el único hobby que tiene es disfrutar con su familia, sus dos hijos.
Durante una visita que el neurocirujano realizó al país, en diciembre pasado, tuvo la oportunidad de ir al Hospital Bloom en donde tuvo contacto con otros colegas. Si bien en estos momentos no realiza colaboraciones con ellos, no descarta que en un futuro pueda aportar sus conocimientos al personal de hospitales de la red pública salvadoreña.
Amplia trayectoria
El doctor Cristóbal Perla y Perla Fuentes se graduó de la Universidad Evangélica de El Salvador en 2008, se especializó en neurocirugía MIR en el Hospital Son Dureta y Hospital Son Espases de Palma de Mallorca, ha sido Profesor asociado en Universidad Rovira i Vigili, Tarragona.
Sus áreas de interés son la microcirugía cerebral y columna vertebral, técnicas mínimamente invasivas por patología intracraneal y columna vertebral.
Entre su experiencia laboral cuenta que es fundador del laboratorio de microcirugía del Hospital Joan XXIII, coautor del protocolo de manejo de hemorragia cerebral del recién nacido del Hospital Juan XXIII, en Tarragona, entre otros muchos logros.
Es miembro adherido de la Sociedad Española de Neurocirugía; miembro de la Asociación Europea de Sociedades de Neurocirugía y del Colegio Oficial de Médicos de Tarragona, Cataluña.