Decenas de vendedores llegaron desde muy temprano a ofrecer sus productos en las afueras del mercado central y aunque aseguran que tienen miedo al virus se ven obligados “por necesidad”.
Rosa Lilian Renderos, de 62 años de edad, camina en las afueras del mercado ofreciendo ajos. Ella asegura que ni si quiera fue beneficiada con el bono de $300 y hoy que inicia la fase 1 de apertura económica aprovechó para ir a ganar aunque sea $1.
“Con el dolor de mi alma he tenido que salir, voy a ganar lo que voy a gastar en taxi para irme, pero un dólar no llega a la casa y yo no recibí ni la canasta, pero como dice la canción ‘de esta me levanto’ y voy a salir adelante”, expresó con lágrimas en los ojos.
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Así como ella, otros vendedores expresaron que han decidido salir porque tienen que pagar recibos, dónde vivir y comer.
Otto Marlon Trejo empuja su carretón con varios artículos como ganchos y colas para el pelo, pasta de dientes, rasuradoras con la esperanza de vender algo.
“Hasta hoy salimos porque hay que alimentarse y uno tiene necesidad, pero aquí ando mi desinfectante porque hay que desinfectarse las manos, dice el vendedor mientras saca una botellita con “lejía con agua”, dijo.
El movimiento de vendedores ya es evidente, no así el de compradores, en este primer día de reapertura económica.
Distanciamiento físico, una dificultad en los alrededores del mercado Central
Mantener una distancia de un metro y medio o dos es lo recomendable para evitar la propagación del COVID-19, pero estas imágenes captadas en la zona del mercado Central muestran que esto es un verdadero problema.