La fuerte tormenta del lunes 7 de junio puso a prueba la administración de distintos municipios en la zona metropolitana de San Salvador y en importantes ciudades del país, donde varias comunas aún se están adaptando a los cambios de administración en los gobiernos locales, pues muchos iniciaron su periodo apenas el 1 de mayo anterior.
En muchas de ellas hay personal nuevo en áreas de emergencia y protección civil, por lo que esta tormenta y las que vengan en la época lluviosa anual -que normalmente finaliza en diciembre- serán un ejercicio de medición de capacidad para las autoridades entrantes, así como para las que continúan al frente.
Cada año, los meses de abril y mayo son clave para cada comuna en cuanto a las medidas preventivas a tomar, sobre todo en las comunidades que están bajo riesgo, sea por su cercanía a quebradas o afluentes, por la presencia de taludes o por la posibilidad de deslaves en sus construcciones. Por ello, es importante en cada localidad el trabajo previo en la limpieza de tragantes, desalojo de desechos en quebradas, campañas de concientización con cada población y colocación de plásticas en zonas de riesgo, así como distintas obras de distinta envergadura, para contener que las lluvias terminen produciendo daños en viviendas, colonias, barrios, etc.
La noche del lunes provocó daños y colapsos por lluvias, sobre todo en la franja de 9 p.m. en adelante, en municipios como San Salvador, Soyapango, Ilopango y Mejicanos, en buena parte por falta de mantenimiento en tragantes, pero también por la falta de aseo en las aceras, en una responsabilidad compartida con la ciudadanía que bota basura y desechos en las calles.
En San Salvador, la lluvia puso en riesgo a 24 familias en la comunidad El Bambú 2, dentro del cementerio La Bermeja, por lo que al menos 11 familias fueron llevadas al Gimnasio Adolfo Pineda, en la Colonia Flor Blanca, según confirmó el concejal Héctor Silva Hernández.
Otras contingencias ocurridas en la capital fueron: árboles caídos en Altos del Bulevar, colonia Costa Rica y Altamira; anegación de agua en 49a. Avenida Sur y calle Roosevelt, 25a. Avenida Sur, Calle Federal Alemania, Calle 5 de noviembre y Colonia La Rábida.
Así mismo, la comuna activó personal para atender inundaciones en comunidad Grecia, final de la Alameda Juan Pablo II y Avenida Independencia, así como en la comunidad Sánchez. Y en la comunidad Nuevo Israel, Protección Civil Municipal "evaluó la situación de las familias, sin embargo no se realizó ninguna evacuación, ya que los niveles de la quebrada La Lechuza se mantenían normales", informó la municipalidad.
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A juicio del concejal Silva Hernández, el trabajo de la administración entrante del alcalde Mario Durán ha hecho una buena labor dentro del plan invernal, "que lanzaron ha sido muy efectivo y rápido, con impermeabilización con plásticos en lugares de riesgo, limpieza de tragantes y quebradas"; sin embargo, estarán atentos a nuevas contingencias.
Albergados en Soyapango
"El lunes quedó en evidencia: si desde San Salvador hay problema de basura, río abajo Soyapango sufre. El llamado a las autoridades de la capital, a que se redoblen esfuerzos sobre el tema de los residuos, porque eso hace un tapón en Soyapango y eso termina afectando", expresó Juan Pablo Álvarez, exalcalde de Soyapango y hoy concejal en la comuna.
Álvarez detalló que la comuna, que ahora dirige la alcaldesa Nercy Montano, ya activó el albergue de FUSALMO, una medida preventiva por si las lluvias se salen de control en los próximos días.
Nelson Amaya, jefe de protección civil de la comuna, explicó que entre las zonas más afectadas por la tormenta del lunes están las colonias Marely, 1o. de diciembre y El Cacao II.
Foto EDH/ Jonatan Funes
En cuanto a la Marely, "hay 16 adultos y tres niños que se fueron con vecinos, que los recibieron en sus viviendas para mantenerlos seguros"; también la oficina de Protección Civil detalló a El Diario de Hoy que hubo un árbol caído sobre una casa en la colonia Las Flores.
El concejal Álvarez explicó además que algunas familias fueron trasladadas de los apartamentos de La Atonal hacia el templo del Tabernáculo Bíblico, cercano a Plaza Mundo.
Para el exalcalde, la actual administración pudo haber hecho un mejor trabajo en cuanto a la mitigación, "sobre todo en colocación de plásticos y la limpieza de tragantes y alcantarillas que se hace en abril y mayo; pero de ahí, el estarse preparando con albergues es la mejor medida", valoró.
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Explicó Álvarez que, entre las cárcavas que más preocupan en suelo soyapaneco, están -además de la Maraly y El Atonal- la Hacienda Prusia, en Bosques de Prusia, Bosques del Río, San José I y II, Montes de San Bartolo 5, Comunidad Nueva Esperanza. "Hay miles de personas en riesgo, no son cientos, son miles", comentó, sobre la población que podría hasta perder sus hogares en las zons.
"Es importante que el Viceministerio de Vivienda interactúe más con los lugares donde ya es imposible que la gente viva. El trabajo de mitigación es tan caro, que definitivamente más vale mudar a algunas países para otros territorios", agregó Álvarez.
Problemas en Mejicanos e Ilopango
Varios sectores de Mejicanos se quedaron sin servicio de energía eléctrica durante horas, después de la tormenta del lunes por la noche.
En Ilopango, las lluvias provocaron que la mitad del parque de Las Cañas se hundiera.
Ángel Torres, asistente de Protección Civil de la alcaldía ilopaneca, informó también que hubo una fuerte inundación en el triángulo de Santa Lucía, un área que en los últimos años se ha visto afectada por las lluvias.
"Estamos haciendo labores de limpieza. Hay mucha arenilla y gravilla; también hemos hecho inspecciones en zonas vulnerables, siempre en Santa Lucía pero también en la 10 de octubre, y visitas a comunidades en el Lago de Apulo", detalló Torres. Hasta ayer por la tarde, solo habían evacuado a tres niñas y su madre en la 10 de octubre; ellas "vivían en una casa de láminas, fueron llevados a la casa comunal y están resguardadas por el momento", comentó el empleado municipal.
Torres dijo que hay preocupación pues en Ilopango "el alcantarillado no da abasto, no tiene el diámetro adecuado para la cantidad de fluidos que baja" en cada tormenta; por ello, hizo un "llamado a los habitantes, de ser más responsables con los desechos de la basura".