Después de más de dos semanas de que la Administración Nacional de Acueductos y Alcantarillados (ANDA) abasteció el Gran San Salvador con agua pestilente, y tras numerosas denuncias de la población afectada, el presidente Nayib Bukele abordó la problemática en conferencia de prensa este martes por la noche.
Bukele reconoció que por falta de monitoreo de calidad, los salvadoreños se vieron afectados con agua contaminada con algas. También reconoció la respuesta tardía ante la emergencia.
“Pedimos disculpas como gobierno, debimos haber actuado más rápido. No debimos haber permitido que el problema pasara tantos días sin resolverse”, dijo el mandatario. Aseguró que la problemática ya está resuelta, y que “el agua ya tiene el nivel de calidad que tenía antes”, pero que continuarán con el plan de contingencia hasta el próximo domingo. El costo de dicho plan supera los $300,000, indicó.
Asimismo, explicó que el Gobierno compró sulfato de cobre para solucionar el problema de las algas y que la cantidad colocada al agua no afecta la salud humana. El cambio en el sabor y color del agua tardó 15 horas en llegar de Las Pavas a los tanques de bombeo.
Sin embargo, durante toda la crisis, las autoridades nunca especificaron qué tipo de alga estaba contaminando el agua. Biólogos pidieron que ANDA informara al respecto. “Hubiese sido bueno que el titular hubiera identificado el tipo de microalga para saber si genera peligro para la salud humana”, opinó días atrás el biólogo Enrique Barraza.
Por otro lado, a los funcionarios, Bukele les pidió que no vuelvan a negar un problema que es denunciado por la población ni que descarten las quejas que llegan a través de redes sociales.
Durante los primeros días de la crisis por la mala calidad del agua, el presidente de Anda fue objeto de críticas tras declarar en una entrevista televisiva que la población “puede tomar agua del chorro sin problema”. El funcionario fue más allá al decir que él lo había hecho durante años, y que incluso “estaba más delgado”.
El pasado sábado, el Gobierno desplegó militares en la planta potabilizadora de Las Pavas y comenzó a distribuir cientos de miles de botellas con agua para los habitantes de zonas afectadas. Ello despertó también cuestionamientos en redes sociales debido a la contaminación que representa esa cantidad de plástico.
Sobre esto, Bukele ordenó a los funcionarios un plan para recuperar la misma cantidad de plástico que fue repartida: “Quiero un millón y medio de botellas recicladas”.
Además, dijo que se debe trabajar en proyectos que sean una alternativa a la planta de Las Pavas y solicitó a ANDA que continúe con el plan para potabilizar el agua del lago de Ilopango.
No obstante, volver potable el agua del lago para el consumo de miles de habitantes de Soyapango, Ilopango y San Martín sería muy complejo debido a que tres estudios han señalado que el agua no es apta para potabilizar, para el uso de riego y para actividades recreativas sin restricción, según un reportaje de El Diario de Hoy.
Usuarios perciben leve mejoría en problema de agua
Pese a que el mandatario afirmó que “la crisis de las algas ya no está”, algunos ciudadanos reportan que en ciertas zonas el mal olor y sabor del agua ha disminuido, pero que en otras colonias la mala calidad del agua persiste.
Loly Cortez dijo que en su vivienda “comenzó a caer limpia y sin mal olor; pero el problema es que les está llegando cada diez días” y eso es desesperante. “Pedimos que nos den el agua un día sí y un día no, mejoren el servicio”, expresó por medio de las redes sociales de elsalvador.com.
En Villa Mariona N° 1, si bien les ha comenzado a caer el agua, pero es por pocos días, “el horario debe de ser más extendido”, opinó Margarita Morga.
Otro usuario expresó en las redes de elsalvador.com que el agua les ha comenzado a llegar más clara; sin embargo, el problema persiste de mal olor y sabor. “Se siente demasiado a tierra, pero cae más clara que hace cuatro día, cuando caía verde”, dijo Hernández Maravilla.
Juan Morales opinó que la calidad está mejorando poco a poco y el mal olor ha ido disminuyendo.
Diferente percepción hay en la colonia Jardines de la Hacienda, en Ciudad Merliot, municipio de Santa Tecla. Ahí los inconvenientes con el agua siguen igual; el problema lo han tenido “desde siempre” y el abastecimiento es pésimo porque se las cortan cada media hora, se quejó Alfredo Alfaro en redes sociales de elsalvador.com.
“Hemos encontrado la solución al problema de las algas en la Planta Potabilizadora de Las Pavas. El agua ya está libre de algas, toxinas, sabor o colores extraños”, escribió el mandatario en su cuenta de Twitter horas antes de la conferencia de prensa junto con el gabinete de Gobierno.
Diferentes versiones sobre origen de la pestilencia del agua
Desde hace más de una semana, miles de salvadoreños han recibido agua pestilente y con una apariencia turbia. Y ante el silencio de las autoridades del Gobierno durante el inicio de la emergencia, fueron varias las versiones que surgieron sobre la posible causa del problema.
En un primer momento, Frederick Benítez, el presidente de Anda, sostuvo que el mal olor en el agua había sido provocado por una proliferación de algas. El agua del río Lempa es tratada en la planta potabilizadora de Las Pavas, en San Pablo Tacachico, La Libertad, y desde allí distribuida a gran parte de San Salvador.
Sin embargo, con el pasar de los días, ni el presidente de ANDA ni otra autoridad de Gobierno, de Medio Ambiente o de Salud brindaron más detalles técnicos que dieran la certeza de lo ocurrido, mientras aumentaban los reclamos de usuarios.
La ministra de Salud, Ana Orellana, manifestó el sábado anterior en conferencia de prensa que el agua se podía consumir, pero recomendaba hervirla o usar filtros.
Otra de las posibles causas de la pestilencia en el agua, planteada recientemente, son los pozos recién habilitados por ANDA. El agua de esos manantiales podría contener metales.
“La gente también se ha quejado por el agua que les llega de los nuevos pozos que la Anda ha abierto en Apopa, Soyapango y otros municipios. El agua allí tiene manganeso y hierro, que cuando está arriba de las normas, el agua es diferente”, explicó a elsavador.com un ex técnico de la autónoma.
El especialista sostuvo que, en el caso de los pozos, el agua es enviada directamente sin pasar por una potabilización previa.
El presidente Bukele también reaccionó a esta última posibilidad y descartó que la perforación de nuevos pozos y la rehabilitación de otros haya causado la mala calidad del agua en el área metropolitana. “Los pozos no pueden contaminar Las Pavas porque no están conectados”, justificó.