El proyecto de mejora de la planta de potabilización Torogoz, ubicada en el caserío Las Pavas, cantón Papaturral, de San Pablo Tacachico, La Libertad, es una realidad gracias a los fondos provenientes de la cooperación internacional que se gestionaron durante gobiernos anteriores y que totalizan $78.4 millones de dólares.
Solo Francia, durante la gestión gubernamental del FMLN, otorgó un préstamo de $61.5 millones de dólares para llevar a cabo las obras en la que hasta el lunes era conocida como planta potabilizadora Las Pavas; al que luego se sumó otro empréstito de 16.5 millones brindado por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), así como el aporte de $250.000 que hizo el gobierno español.
Eso contrasta con la afirmación que el presidente Nayib Bukele hizo, durante la reciente inauguración, en relación a que administraciones anteriores no hicieron nada para la mejora de la infraestructura que fue construida entre 1988 y 1993.
Bukele y el mismo presidente de la Administración Nacional de Acueductos y Alcantarillados (ANDA), Rubén Alemán, han argumentado que el proyecto marchó lento, que cuando llegaron estaba al 3 % de avance físico y un 17 % de avance financiero. No obstante, la inauguración tuvo un retraso de dos meses puesto que Alemán había dicho que estaba prevista para julio.
Los pasos para la mejora de la planta, que se dieron en anteriores gobiernos, incluyeron por ejemplo en 2013 la ejecución de un diagnóstico sobre la situación del inmueble, luego la gestión internacional de los fondos, la solicitud del aval de los préstamos a nivel del Legislativo, la licitación para el rediseño y factibilidad económica, la gestión de equipos, entre otros.
En 2013, la licitación para el rediseño y factibilidad económica se adjudicó al consorcio salvadoreño - español Vielca - EC Consultores, esto luego de que en forma previa había sido declarada desierta en dos ocasiones.
Cinco años después, en 2018, antes de la llegada de Bukele, se adjudicó la licitación de la rehabilitación a la empresa Suez. Desde entonces se había proyectado que la planta alcanzara una capacidad de producción de 3 metros cúbicos por segundo, con el fin de garantizar el acceso al abastecimiento de agua permanente.
Durante la reinauguración de lunes pasado, en busca de desmarcarse de la imagen de fallos y problemas en la planta en años anteriores, la administración Bukele decidió cambiar su nombre de Planta Potabilizadora Las Pavas, a Torogoz, el ave nacional.