Fiscalía archiva el caso sobre la muerte de un militar en río Torola

Les han dicho que se trató de un accidente y que por eso archivaban el caso. Fuerza Armada tampoco indagó el caso.

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Daysi Romero y Miguel Méndez sostienen la foto de su hijo, el subsargento que el pasado 17 de abril se ahogó en la poza El Cajón, del río Torola, durante el curso de Comando de Montaña. Foto EDH / Archivo

Por Jorge Beltrán Luna @Jbeltranluna_

2021-11-10 9:00:25

Sobre la muerte del subsargento Miguel Ángel Méndez Romero no hay nada más que investigar, según ha dicho la Fiscalía a la familia del militar. Les han dicho que fue un accidente y que el caso está cerrado.

Méndez Romero murió ahogado en una poza del río Torola, departamento de Morazán, el pasado 17 de abril, mientras participaba en un curso de Comando de Montaña, impartido por instructores del Destacamento Militar No. 4, con sede en San Francisco Gotera, departamento de Morazán.

El subsargento Méndez Romero estaba de alta en la Segunda Brigada de Infantería, con sede en Santa Ana. Vivía en una zona rural del municipio de Chalchuapa, junto a sus padres y hermanos.

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Días después de que el joven militar fuera sepultado, sus padres dijeron a El Diario de Hoy que tenían la esperanza de que el caso fuera investigado, pues no era convincente la versión que la Fuerza Armada les había dado sobre cómo ocurrió la tragedia.

Como en el caso de los tres militares que murieron ahogados el pasado jueves en una playa de Acajutla mientras participaban en un curso de nadadores de combate, en el caso de Méndez Romero solo informaron que se había ahogado.

Según los padres de Méndez Romero, Miguel Méndez y Daysi Romero, el ministro de Defensas les dijo que estaban en su derecho pedir que se investigara el caso.

Caso archivado

De acuerdo con familiares del subsargento Méndez Romero, la Fiscalía no abrió expediente de investigación sino hasta aproximadamente cuatro o cinco meses después, luego de que los familiares viajaran a la oficina de la Fiscalía en San Francisco Gotera, a solicitar la investigación.

Dos meses después, cuando se acercaron a indagar sobre los avances, se llevaron la sorpresa de que se había determinado que fue un accidente.

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De acuerdo con familiares, la Fiscalía hizo investigación con instructores y alumnos del curso del cuál era parte el subsargento Méndez Romero.

“Dijeron que hicieron la investigación con alumnos e instructores y que hasta donde habían llegado es que se había tratado de un accidente y que archivarían el caso”, comentó un familiar.

A nivel de Fuerza Armada tampoco fue investigado el caso. La institución castrense tiene una inspectoría pero tampoco hicieron nada por indagar sobre el caso, afirman los dolientes.

Sin embargo, familiares del Méndez Romero aseguran que han tenido conocimiento que en la jornada de entrenamiento cuando Méndez Romero se ahogó, había cuatro buzos pero que estos no contaban con el equipo necesario para buscar de inmediato al militar.

Otras versiones del caso, según familiares, es que al sentirse en peligro, Méndez Romero pidió auxilio pero nadie acudió en su ayuda.

Méndez Romero se había inscrito en el curso de Comando de Montaña porque eso le abría la posibilidad de ascender a sargento, con lo cual se convertiría en suboficial y podría hacer carrera dentro de la Fuerza Armada.

Como en el caso de los tres militares ahogados el jueves, Méndez Romero vio en el Ejército una forma diferente de ganarse la vida en lugar de trabajar en la agricultura o fincas cafetaleras de su domicilio.