Enterarse a los seis meses de embarazo que llevaba tres bebés en su vientre provocó en Keyla Polanco angustia y llanto que le duró dos semanas. Pero no fue porque los rechazara, sino porque en su mente replicaba a cada momento la siguiente frase: “¿cómo le voy a hacer?”.
Keyla, quien pertenece a la corporación policial desde hace ocho años, sumaba una importante tarea a su vida: ser madre y de tres pequeños.
“Sufro cuando ando en la calle patrullando por estar pensando si mis hijos tienen alguna necesidad”, contó esta mujer, originaria de Santa Ana y quien ahora tiene dos importantes labores: ser mamá de cuatro pequeños y dar seguridad a la población.
Precisamente su trabajo era lo que más le angustiaba, pues para entonces se encontraba destacada en Santa Tecla, La Libertad, y eso la obligaría, tras la licencia por maternidad, a dejar a sus tres hijos por largos periodos, ya que reside en Izalco, Sonsonate.
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Pero para Keyla, de 31 años, la vida le dio una sorpresa cuando las ultrasonografías revelaron en su sexto mes de gestación, que su embarazo era múltiple.
Dos niñas y un varón nacieron el 1 de noviembre del año pasado. Cuando la agente regresó a sus labores, los pequeños quedaron bajo los cuidados de su familia.
“Gasto dos botes de leche cada semana. Menos mal que pude conseguir el traslado de Santa Tecla a Sonsonate en esta cuarentena porque he sufrido en trasladarme a amamantar a mis hijos y estar sin goce de licencia en esta emergencia”, relató Keyla mientras realizaba un patrullaje en la cabecera departamental.
La joven madre, quien también tiene una hija de cinco años, señaló que estos días de emergencia han sido difíciles ya que los gastos se han incrementado. Tiene siete años de casada.